Ahora me tocó a mí. En mi viaje de retorno de Olón a Guayaquil, el lunes 9 de marzo, según la citación, el radar ubicado en el kilómetro 62 de la vía Salinas-Guayaquil en el sector Sucre-Olmedo, a las 09:21 detectó que mi vehículo circulaba a 130 kilómetros por hora.

El día 9 salí de Olón a las 06:45 y debí haber estado en el kilómetro 62 alrededor de las 08:00, jamás pude haber circulado a 130 kilómetros por hora, viajo con velocidad de crucero fija a 95 kilómetros por hora. Por ninguna circunstancia me atrevería a viajar a 130 kilómetros, soy una persona de la tercera edad calificada como discapacitado y me precio de ser prudente. Adicional a esto es que a las 09:21, hora que según la citación circulaba por el sitio de la infracción, yo ya me encontraba en mi oficina en el kilómetro 19 de la vía a la costa, en donde según el informe que elabora el personal de vigilancia en la garita de ingreso a mi trabajo, había llegado a las 09:03. Es una clarísima demostración de que los fotorradares no funcionan correctamente, ocasionando que al transitar por la vía a la costa se corra el riesgo de recibir una citación injustificada. (O)

Raúl Gustavo Larrea Real,
Ingeniero, Guayaquil