No puedo creer lo que está sucediendo con los radares en la vía Salinas-Guayaquil. Con tantas quejas la CTE debería correr a investigar a fondo.

Si la CTE asegura que los aparatos son “absolutamente fiables”, entonces que me explique ¿por qué mi velocímetro me indica la velocidad de 95 kilómetros por hora, el panel del radar me indica 95 kilómetros por hora, y las citaciones me indican 119 kilómetros por hora, en una ocasión; y dos semanas después, el mismo radar, y luego unos 16 minutos más tarde, en otro radar me indican cada uno 115 kilómetros por hora? Me da pena lo que está pasando, ya que estimo mucho a la CTE, que trabaja muy duro, especialmente durante los fines de semana y los feriados, y entiendo que debe estar orgullosa con su “éxito” en la vía a la costa; pero en su lugar me preguntaría ¿por qué algunos de los radares tienen tantos infractores?, se va a repetir esto. Una sugerencia a la Comisión de Tránsito del Ecuador: tiene tantos radares móviles, ¿por qué no prueban paralelamente en esos radares con alto porcentaje de infractores? Me duele pagar por una infracción, en lo posible no las cometo. Voy a aplicar lo que recomienda el señor presidente en las sabatinas: no voy a parar con correos electrónicos y Twitter (a la CTE, Ministerio de Transporte y al presidente) hasta que se haga justicia. (O)

Stephan Paul Malik Ferreira, Guayaquil