Ayer se inició la Cumbre de los Pueblos, convocada por la Conaie, el Frente Unitario de Trabajadores y la Ecuarunari “por la unidad, la soberanía y la defensa de las organizaciones”. Asisten miembros de comunidades, sindicalistas, trabajadores, jubilados y personas de diversos sectores que se suman a los planteamientos de los organizadores.

Esperan lograr que sus puntos de vista sobre la Ley de Tierras, el Nuevo Código del Trabajo y la Ley de Seguridad Social sean escuchados, así como exigir una respuesta de la Corte Constitucional sobre la demanda de inconstitucionalidad del decreto 16.

La Conaie alista una marcha para defender su sede en Quito, considerada por ellos como un símbolo de la resistencia y la lucha del movimiento indígena. El local les había sido cedido en comodato y en diciembre del año pasado se les solicitó la devolución.

Esta cumbre se realiza en un momento difícil para la organización, que se ha debilitado con la aparición de un grupo disidente identificado con el oficialismo.

En todo caso, es una búsqueda de unidad, que merece respeto, pues se trata de ecuatorianos ejerciendo un derecho garantizado por la Constitución y por la Declaración Universal de los Derechos Humanos. (O)