Yo creo que oír música repetitiva podría tener una repercusión psicológica.

Hay evidencia científica que liga los sonidos repetitivos con la higiene mental. Por ejemplo, en Inglaterra se pidió al gobierno que investigara si la música navideña que se repetía constantemente en centros comerciales durante diciembre, causaba daño psicológico a los dependientes de las tiendas.

A pesar de que mis hijos disfrutan enormemente de escuchar la música de los carros recolectores de basura cada vez que pasan, y salen a verlos emocionados, creo que para los señores recolectores no debe ser tan fácil deshacerse del sonido dentro de sus cabezas al llegar a sus hogares. Con todo respeto sugiero que el Municipio de Guayaquil estudie este procedimiento para ver si repercute en la salud.(O)

Manuel González Astudillo, Guayaquil