Resulta difícil entender por qué se ha aislado a la ciudadela Puerta del Sol, a la altura de la antigua toma de agua, del camino alterno interior paralelo a la vía a la costa que interconecta a las urbanizaciones privadas desde Puerto Azul hasta Terranostra con centros comerciales y diferentes negocios; mientras que a la ciudadela Puerta del Sol se le pone un parterre de hormigón al final del camino, que impide conectarse con su principal vía de ingreso, afectando el derecho de sus moradores para disfrutar de esa nueva ruta y sin poder ofrecer sus servicios al sector, pues la mayoría de sus familias están integradas por personas sencillas pero emprendedoras que tienen diferentes negocios como gabinete de belleza, panadería, tienda de abastos, taller automotor, lavadora de carros, vulcanizadora, comedores, servicio de taxis, etcétera.

Salvo una razón técnica que lo justifique, sugiero que la entidad que tiene a cargo el diseño y construcción de la obra considere la opción de eliminar el parterre y empatar la nueva vía alterna con la avenida principal de ingreso a la ciudadela Puerta del Sol. (O)

David Castro Alarcón, médico, Guayaquil