Sugiero al alcalde Nebot para solucionar el problema del transporte urbano en Guayaquil que se conforme una empresa municipal de economía mixta en la que intervendrían el Municipio y los dueños de los buses, al valor del avalúo de sus unidades; con lo cual estos dejarían de ser los dueños de los buses y pasarían a ser accionistas de esta empresa, que determinaría el costo del pasaje de acuerdo a los gastos, estableciendo un beneficio mensual para los accionistas. Los choferes tendrían afiliación al IESS y demás beneficios de ley.

La nueva empresa deberá reorganizar los recorridos para evitar que varios buses de una línea circulen al mismo tiempo y con poquísimos pasajeros, o la escasez de buses en las horas pico, o líneas que tienen recorridos extensos contra otras de recorridos muy pequeños. Además crearían otras empresas para dar los servicios de lavado, repuestos, reparaciones, etc., a los miles de buses de esta nueva compañía. Sugiero un sistema parecido al de Nueva York, donde pasajeros utilizan una tarjeta magnética con recargo, ya la tiene la Metrovía y pueden cambiar de bus varias veces dentro de un plazo de tiempo, por ejemplo, en una o dos horas sin tener que pagar otra vez; beneficiará a las personas que tienen que tomar más de un bus para llegar a su trabajo. Además que se puede diferenciar el valor por pagar, a estudiantes y personas de la tercera edad; otro beneficio: la eliminación de la competencia entre buses para ganar pasajeros.
Roberto Ordóñez Simmonds,
Ingeniero comercial, Guayaquil