Una estudiante universitaria vio que un cuerpo se encontraba botado cerca de una casa abandonada la mañana del miércoles en el barrio Santa Marianita de Jesús de Laquigo, en Atocha, Ambato, pero contó que pensó que era un borracho que se había quedado dormido vencido por el licor, que por eso no le tomó importancia.

Fausto Naranjo fue quien junto a un vecino del lugar el jueves en la noche se acercaron a ver el cuerpo para ver si era de alguien conocido, pero que se llevaron un gran susto porque se percataron que en el rostro estaba con sangre, al igual que la ropa.

Entonces fue cuando decidieron dar aviso a las autoridades, enseguida se hicieron presentes peritos de la Unidad de Delitos Contra la Vida (Dinased), Criminalística y Fiscalía, quienes luego de los trámites de ley procedieron a realizar el levantamiento del cadáver del hombre de unos 35 años.

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El teniente Roberto Llamuca, jefe de la Unidad de Delitos Contra la Vida en Tungurahua, hizo conocer que se realizará la investigación correspondiente con el fin de determinar el móvil de la muerte.

El cadáver encontrado presentaba una herida al parecer causada con una piedra o palo en la cabeza, además de huellas en las manos como de defensa, de acuerdo a los peritos de la Dinased.

Miguel Pincay, habitante del barrio, no ocultó la preocupación al señalar que nadie se enteró de que haya pasado algo así muy cerca de sus casas. (I)