El popular Santuario de Fátima, en Portugal (en Europa), acogió el último fin de semana una reliquia con sangre de san Juan Pablo II, en ocasión de su fiesta celebrada el 22 de octubre y en el marco de los 100 años de las apariciones de la Madre de Dios en Cova de Iría.

La reliquia es un trozo ensangrentado de la ropa que usó san Juan Pablo II en el atentado que sufrió el 13 de mayo de 1981 en la Plaza de San Pedro.

“Este reliquia simboliza la condición de la Iglesia en el mundo, siempre sujeta a provocación y al martirio”, dijo el padre José Nuno Silva, capellán del Santuario de Fátima, publicó el portal de Aciprensa.

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Él presidió la celebración para recibir la reliquia en la Capilla de la Resurrección de Jesús, donde fue colocada para su veneración.

En el acto se leyó el tercer secreto de Fátima y se recordó que la oración que san Juan Pablo II rezó en Fátima en mayo de 1982 cuando visitó por primera vez el santuario y consagró la humanidad al Inmaculado Corazón de María.

El domingo 22 se celebró una misa en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en la que participaron algunos acólitos que sirvieron cuando san Juan Pablo II visitó el lugar en 1982, 1991 y 2000.

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En la eucaristía se recordó la “especial dimensión” de acoger la reliquia, resaltando el don de san Juan Pablo II.

Importancia
El domingo, los católicos celebraron la fiesta de san Juan Pablo II (Karol Jósef Wojtyla), el papa peregrino que viajó por el mundo y que resaltó que “el matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia. Los hijos son fruto precioso del matrimonio”. (I)