En medio de los internos que tienen tiempo y de los que van llegando (por la sobrepoblación en otras cárceles manabitas) sobresalen los 20 ciudadanos chinos que guardan prisión, luego de ser sentenciados por la pesca de especies marinas vulnerables, como tiburones, que se les encontró en las bodegas del barco Fu Yuan Yu Leng 999, detenido el 13 de agosto pasado por estar dentro de la Reserva Marina de Galápagos.

En los dos meses que tienen en el centro penitenciario El Rodeo, en Portoviejo, capital manabita, ellos empiezan a hacer amistad con internos ecuatorianos, a quienes les han enseñado la técnica japonesa del origami, con la cual se hacen diversas figuras solo con doblar el papel, sin utilizar goma.

Ellos incluso le dieron, en días pasados, un barco, realizado con la técnica del origami, a Liliana Guzmán, viceministra de Atención a las Personas Privadas de Libertad (internos).

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La funcionaria dice que comprende que para ellos estar en una cárcel de otro país en donde no hablan su idioma debe ser complejo para su convivencia, pero, afirmó, se ha conversado con delegados del consulado de China y se planificó el ingreso y visita de representantes de esa dependencia extranjera a la cárcel de Portoviejo, para que puedan conversar.

Según Guzmán, el estado de salud de internos asiáticos es estable. Aseguró que el episodio en el que se les subió la presión fue controlado con medicinas y con los chequeos respectivos. No fue necesario sacarlos a un centro médico, dijo.

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“Imagínese lo que significará estar privado de la libertad en otro país, con otras personas, con otro idioma”, agregó.

Alejandra Andrade, coordinadora zonal 4 del Ministerio de Justicia, contó que los ciudadanos chinos trabajan en actividades como elaboración de hamacas de plástico y atarrayas con materiales reciclados.

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Los asiáticos habrían estado tristes a fines de septiembre. Ahí llegó un delegado chino a conmemorar la fiesta de la Luna o Festival del Medio Otoño Chino, equivalente al Día de Acción de Gracias en EE.UU. o Navidad, en occidente.

Esto, mientras los abogados del buque Fu Yuan Yu Leng 999 califican como ilegal la entrega de la embarcación, por parte de Inmobiliar, a la Armada del Ecuador. Según ellos, el barco supuestamente no ha sido embargado, incautado y todavía pertenece a sus dueños. (I)

Otros detalles

Proceso. El buque Fu Yuan Yu Leng 999, de bandera china, detenido en agosto pasado en Galápagos, llevaba alrededor de 300 toneladas de pesca, entre las que estaban especies marinas protegidas por Ecuador, como tiburones martillo y silky (sedoso). Se los sentenció por delito ambiental. Abogados de la firma dicen que existe un proceso de apelación, “que a la postre puede confirmar o reversar la sentencia, incluso declarar nulo todo lo actuado”. (I)

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