El barco que colisionó el jueves pasado contra el puente peatonal que une Guayaquil y la isla Santay es parte de la flota registrada por Ecuador en la Comisión Interamericana de Atún Tropical (CIAT), que avala a los pesqueros que capturan especies en esta zona.

Según los registros de la CIAT, la embarcación data de 1979 y pertenece a la empresa Alcelsa, con domicilio en la provincia de Santa Elena.

Esta firma tiene registradas otras dos embarcaciones (Andrea y Mariella) en la Subsecretaría de Recursos Pesqueros.

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La nave que colisionó con el puente había llegado hace tres semanas a un muelle de la calle Camilo Destruge y el día del accidente iba a ser movido a otro atracadero, a la altura de Francisco Segura, más al sur.

Prácticos que asesoran a los capitanes creen que la nave tuvo complicaciones con el motor y fue arrastrado por la marea hacia el puente.

Vea también: Puente a la isla Santay terminó costando unos $ 20 millones

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El Servicio de Contratación de Obras (Secob), entidad encargada del puente, puso una denuncia para que la Fiscalía investigue el caso.

A través de un comunicado, indicó que esta semana entregará un informe con la valoración de los daños y el presupuesto estimado que se invertiría en la reparación del puente peatonal, que terminó costando 20 millones de dólares.

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La empresa armadora del barco involucrado generó el año pasado ventas por $ 4,9 millones y sus activos bordean los $ 20,11 millones, según datos reportados ante la Superintendencia de Compañías.

El jueves pasado, el gobernador Francisco Cevallos, dijo que el barco no tenía el permiso para salir del muelle el día del accidente.

EL UNIVERSO buscó desde el viernes la versión de Alcelsa sobre la colisión, a través de e-mail y llamadas, pero hasta ayer no respondía. (I)