Alrededor de 5 toneladas pesó la carga de donación de víveres no perecibles y otros insumos que fue enviada ayer a México para damnificados del terremoto. La fundación Kahre se encargó del acopio en Quito, Manta, Guayaquil y dos puntos de Samborondón.

Ezequiel Castro, directivo de la organización, estimó que las tres cuartas partes de lo captado provinieron de la provincia de Manabí, que fue la más asolada por el terremoto de abril del 2016, y cuyos pobladores no dejaron de enviar a los mexicanos frases de aliento, como de seguro ellos las recibieron en aquellos días de tragedia.

“Nuestro corazón y fuerza está con todos nuestros hermanos mexicanos; recuerden que no están solos, ustedes estuvieron con nosotros en abril del 2016. Hoy quiero decir Dios está con ustedes. Desde Manabí, Ecuador, con amor para ustedes”, plasmó un donante en una funda de azúcar.

Publicidad

“Nunca olvidaremos la labor que hicieron por el Ecuador. Con ustedes, hermanos mexicanos”, escribió otro solidario en una funda de lenteja.

“Los grandes cambios siempre vienen acompañados de una fuerte sacudida. No es el fin del mundo, es el inicio de uno nuevo. Fuerza, México, desde Ecuador estamos orando por ustedes. Portoviejo”, fue otro de los mensajes.

El país azteca, asolado el 19 de septiembre por un terremoto de magnitud 7,1 en la escala de Richter, cuyas víctimas mortales ya superan las 300, envió al país víveres y rescatistas, como los reconocidos Topos de México.

Publicidad

La carga enviada por vía aérea ayer a México excluía las botellas de agua, por un asunto de manejo del peso. El directivo de Kahre señaló que estas iban a ser entregadas a entes de socorro. (I)