Pacto por la seguridad vial para reducir mortalidad en carreteras

“Un error terrible... llenos de novelerías” fue la frase usada por el presidente Lenín Moreno para calificar la eliminación del curso de manejo para obtener la licencia de conducir no profesional por primera vez, reforma legal que fue apoyada por el expresidente Rafael Correa, en el 2014.

Este fue uno de los primeros pedidos de cambio que realizó Napoleón Cabrera, presidente de la Federación Nacional de Transportistas de Carga Liviana y Mixta del Ecuador, al presidente Moreno, antes de la firma del Pacto Nacional por la Seguridad Vial, de iniciativa gubernamental.

“Ustedes, como están empeñados en rectificar errores de buena fe que se cometieron, es hora también de hablar de una reforma legal que implique obligar a capacitar a todo aquel que sale con un vehículo a las carreteras”, dijo Cabrera.

El Pacto tiene como principal objetivo promover como política de Estado la generación de una cultura de seguridad vial que involucre a todos los actores públicos y privados en la búsqueda y aplicación de las medidas de prevención a los siniestros de tránsito.

Esto implica, en la práctica, reducir los siniestros en las carreteras al 11% por cada cien mil habitantes en el país. Ahora sobrepasa el 17%, según informó ayer el ministro de Transporte y Obras Públicas.

Imágenes del accidente del pasado domingo 13 de agosto en el peaje de Oyacoto, en la Panamericana Norte, donde un bus chocó contra tres vehículos.

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Moreno sostuvo que cada cuatro horas se pierde una vida y “los accidentes de tránsito van en aumento, cuando el deseo era de que eso disminuyera”.

“La vida de un ser humano es sagrada, los transportistas, la persona que maneja un vehículo debe tomar en cuenta que cualquier descuido, por segundos, puede provocar su muerte o la muerte de inocentes... Sí hay choferes que tienen instintos perversos, hay que detectarlos”, agregó Moreno.

Entre las estadísticas expuestas, Granda señaló que hay 1.011 fallecidos en el primer semestre de este año por siniestros y que entre las causas principales están conducir desatento, exceso de velocidad, irrespeto a las señales de tránsito, cambio brusco de carril, conducir bajo efectos de alcohol y estupefacientes, no ceder el derecho a vía al peatón ni a vehículos, no guardar la distancia lateral entre vehículos.

Este Pacto involucra a los dirigentes nacionales de las once modalidades de transportistas, entidades del Gobierno Central, municipios, los sistemas judicial y educativo y organizaciones no gubernamentales.

Guillermo Abad, de Justicia Vial, dijo que el principal problema en este ámbito es la inobservancia de la ley por parte de los actores involucrados.

Respecto de la reforma legal pedida por los transportistas, Gustavo Jalkh, titular del Consejo de la Judicatura, ratificó que se podría volver a los cursos de conducción estableciendo regulaciones en los precios y en las escuelas de conducción.(I)

Asistentes

Firma del Pacto Estuvieron en el acto Paúl Granda, ministro de Transporte y Obras Públicas; Gustavo Jalkh, presidente del Consejo de la Judicatura; Andrés Mideros, titular de la Senplades; Alberto Arias, asambleísta; Abel Gómez, representante del Transporte Público de Pasajeros; Napoleón Cabrera, delegado de Transporte de Carga Liviana y Mixta; y Guillermo Abad, de la Fundación Justicia Vial.

Pacto

Acciones a corto plazo
Mejorar los niveles de control en las vías, a través de la coordinación institucional periódica. Pilares de gestión: vías, vehículos y usuarios más seguros y respuesta a siniestros de tránsito.