Veintiún piezas que reflejan la tradición marítima de la ciudad y los años en los que se debía defender de ataques piratas se encuentran a unos 60 metros de altura, en la cima del cerro Santa Anta de Guayaquil.

El Museo Naval Fortín del cerro Santa Ana, que está por cumplir 15 años de construido, es un espacio abierto que expone reliquias bien conservadas que datan desde el siglo XVI.

Allí hay armas y cañones, unos originales y otras réplicas, que formaban parte del armamento usado en los siglos XVI y XVIII para la defensa de la ciudad.

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El museo también tiene algunos instrumentos de navegación, como un astrolabio náutico, usado para observar la altura, y movimientos de los astros que servían para orientarse en el mar.

Una reproducción de la proa del galeón ‘Jesús, María de la Limpia y Pura Concepción de Nuestra Señora (1544-1654), construido para el Rey de España y la popa de la Capitana se hallan en ese museo al aire libre. Este galeón se hundió frente a las costas de Chanduy con un importante cargamento que había partido desde Callao (Perú) con rumbo a Panamá. (I)