Asomarse por la ventana y ver el trajín diario que soportaba la avenida 9 de Octubre o deleitarse con los atardeceres porteños eran las imágenes que más le gustaban a Tania Tinoco de Guayaquil cuando tenía 11 años.

A esa edad vino de Machala para estudiar la primaria en el colegio La Inmaculada. La familia Ramírez Franco, amigos de sus padres, la acogieron en su departamento en el cuarto piso de un edificio de la calle 9 de Octubre y Escobedo, precisa la directora del noticiario Telemundo de Ecuavisa.

“Ese fue mi primer contacto con la ciudad, el bulevar 9 de Octubre y mirar a lo lejos el abrazo de (Simón) Bolívar y San Martín, para mí eso era Guayaquil”, recuerda la periodista y reportera con más de 30 años de experiencia.

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Es cerca del mediodía de un lunes y mientras disfruta de la brisa de la ría en el Puerto Santa Ana, uno de sus actuales lugares preferidos, recuerda otra imagen de la ciudad que la acogió, dice, sin pedirle la partida de nacimiento. Es esa vista desde el aire cuando los fines de semana viajaba en avioneta a Machala.

Ya adolescente se mudó a Urdesa, en un departamento que compró su papá. Dejó de ver a diario el bulevar y la avenida Víctor Emilio Estrada, la principal de esta ciudadela, se convirtió en el centro de atracción. “Me parecía increíble poder irme el día viernes a la Víctor Emilio Estrada, era cheverísimo si podía pasear un poco ahí, les decíamos el tontodronazo porque dábamos vueltas una y otra vez (...)”, comenta.

Sonríe mientras menciona que uno de los lugares a donde le gustaba ir en su juventud era Etcétera, una discoteca que fue parte del romance con su esposo Bruce Harderman.

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Tinoco destaca que no se olvida de sus raíces, pero se siente orgullosa de vivir en Guayaquil, ciudad a la que ha visto transformarse.

Recuerda que en alguna ocasión, casi recién casados recibieron a unos amigos de Suiza en el aeropuerto que estaba inundado por las lluvias. “Tenían sus zapatos mojados y sentí dolor y un poco de vergüenza de que ese era el aeropuerto que teníamos. Ahora me da orgullo cuando llego por el aeropuerto y veo las orquídeas y digo este es el Guayaquil que nos merecemos”, resalta.

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Expresa que tal vez porque su esposo es extranjero ha tenido la oportunidad de conocer mucha gente de afuera y es el Puerto Santa Ana donde decide llevarlos. “Vamos a hacer el paseo por Las Peñas, por la 9 de Octubre, pero es aquí en este lugar en este Puerto Santa Ana, en toda esta zona nueva, regenerada, reconstruida, recuperada, donde recibimos los mejores elogios de la ciudad y me siento orgullosísima de poder caminar..., parquear con cierta seguridad”, dice.

Le agrada la comida costeña y al guayaquileño lo considera un ser especial, franco, amable, alegre, “que te recibe, aun cuando no seas de aquí, con los brazos abiertos”.

Dice que le encanta saber que en el futuro Guayaquil contará con obras como un mayor aeropuerto en Daular y la Aerovía. (I)

Guayaquil es mi casa, no olvido mis orígenes, soy de Machala, mi corazón está dividido pero amo a esta ciudad y me siento orgullosa de vivir aquí, aquí formé mi vida.Tania Tinoco ,periodista