El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, durante su habitual enlace radial, analizó el primer mes y mensaje de Lenín Moreno en la Presidencia, al cual lo calificó de “claro y bueno” por decir y practicar cosas simples como suprimir las sabatinas, no aceptar los servicios de la guardia civil y mantener la dolarización.

“Ha establecido una relación cordial con la prensa y empresarios. Todavía no pasa nada con la Ley de Comunicación y no pasa nada con lo económico. Es importantísimo que exista democracia, libertad y se combata la corrupción. El gran problema es lo económico, un petróleo bajo, deuda grande, economía paralizada, empleo que se pierde, eso es lo que hay que atacar, esos hechos van a determinar para donde vamos”, expresó este miércoles.

El pasado 20 de junio, el jefe de Estado y el alcalde de Guayaquil se reunieron a puerta cerrada en una de las oficinas del edificio del Gobierno Zonal de la urbe porteña. La cita se dio el mismo día que el mandatario firmó un decreto para institucionalizar el diálogo nacional con diferentes sectores.

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Investigaciones a Jorge Glas

Este miércoles, Nebot también se refirió al pedido de la oposición de juicio político al vicepresidente Jorge Glas por el caso de corrupción que involucra a la constructora Odebrecht. Según el alcalde, Glas debería "salir o renunciar de su mandato" en el caso de encontrarse pruebas, pero siempre respetándose el procedimiento. Además, indicó que la mejor forma de combatir la corrupción no es solo sancionándola, sino "rodeándose de gente seria, respetable" y a la vez tener una justicia independiente.

En relación a la reestructuración o eliminación del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), Nebot indicó que “ese consejo se llamaba al menos Rafael Correa, porque ahí ganaba el que quería que gane, entonces la justicia no debe estar en manos del poder Ejecutivo”.

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En ese contexto, el alcalde dijo que la persona que gana una elección de presidente tiene el control de una función ejecutiva y el derecho que le da la Constitución y la ley en otras funciones. A la vez, cuestionó, “ahora cuál fue el remedio, hay un solo dueño y ni siquiera es un partido, es una persona, o era”, en referencia al exmandatario Rafael Correa.

El pasado miércoles 7 de junio, la asambleísta por Izquierda Democrática, Wilma Andrade, propuso que se convoque a una consulta popular para eliminar al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social y de esta manera exigir la renuncia inmediata de las autoridades de control para que se nombren nuevas. Este mismo pedido de suprimir o modificar roles del CPC empezó a rondar tras la campaña electoral por excandidatos y legisladores opositores. (I)