El frío es eterno en El Aromo. El viento acompaña a los árboles y las paredes de casas, algunas de ellas de enquinche. Solo la música a todo volumen con melodías de Gerardo Morán o Máximo Escaleras llama la atención en las más de 100 casas que se agrupan en esta comunidad, ubicada a 20 kilómetros al oeste de Manta.

La música vibra tanto que mueve las cañas que sirven como postes que soportan los cables que conducen la energía. Una antena receptora de señal de telefonía móvil no minimiza en gran medida la intermitencia de telecomunicaciones en algunos puntos de El Aromo.

Las calles permanecen vacías y sin asfaltar en algunos casos. Simón Delgado, un vecino de la zona, apoyado en sus muletas, camina sobre la gran vía asfaltada y que forma parte de la Ruta del Spondylus.

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“Aquí prometieron casita para los que no tienen, yo no tengo casa, no han hecho nada todavía”, relata Delgado, quien dice que con el anuncio de la Refinería del Pacífico muchos en El Aromo soñaron con que cambiaría la situación para los más de 400 habitantes.

El colegio para El Aromo es, según Lorena Lucas, otra cuenta pendiente que el Gobierno tiene con la comunidad en cuyas montañas se realizaron mejoras para implantar la Refinería del Pacífico, un proyecto de 13 mil millones de dólares y cuyo financiamiento aún es buscado por el régimen.

También en el lugar, –celosamente resguardado y con casi nula accesibilidad para los medios de comunicación–, se mantienen viviendas que sí han servido tanto para alojamiento de autoridades cuando llegan a Manta o fundamentales para ser base cuando se suscitó el terremoto, según Xavier Santos, gobernador de Manabí.

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El mantenimiento del terreno que servirá de base para la refinería es ejecutado por Ecuador Estratégico, explica Santos, y agrega que El Aromo sí ha sido atendido con adecentamientos, mejoras en unidad educativa y la construcción de un centro de salud tipo A.

Añade que en la actualidad el régimen mantiene diálogos para el financiamiento y que, una vez que se consigan recursos, se dará la inyección económica para que este sector se potencie aún más en lo turístico.

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Pero Carmen Pico, moradora de El Aromo, sostiene que aún falta mucho. En las noches quedan en tinieblas algunos sectores, porque el alumbrado público es casi nulo. “Y a veces se va la luz por horas y no hay solución inmediata”, dice.

Toribio Delgado, presidente de la comuna El Aromo, coincide con las quejas de sus vecinos indicando que el gobierno del expresidente Rafael Correa le quedó debiendo a este sector, como el colegio.

“Se ofrecieron muchas cosas, que El Aromo sería del milenio y hasta la vez se hace eso”, reitera con cierta inconformidad el presidente de esta comunidad manabita, donde casi el 80% tiene un familiar que reside en el extranjero, en España o Italia. (I)

Misiva
Comunidad

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Promesas
Moradores harán una carta dirigida al presidente Lenín Moreno, reiterando la necesidad de que se cumplan algunos aspectos y que la refinería se concrete, “para que los hijos de este sector tengan empleos”.