Tras ser posesionado como presidente de la República, Lenín Moreno ratificó la exigencia que hiciera en campaña a Odebrecht, a la justicia norteamericana y a la brasileña para que entreguen la lista completa de los funcionarios que supuestamente fueron coimados por esta empresa con el fin de obtener contratos.

Convocó a las autoridades de control, a la ciudadanía a constituir un frente nacional, público y privado contra la corrupción, con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Entre las primeras reflexiones que hizo, Moreno expresó que ha concluido una etapa con aciertos y errores y empieza otra que acaso sea más difícil porque no solo deben afianzar los logros, sino mejorarlos, pues “queda mucho por hacer”.

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La familia presidencial. Al presidente Lenín Moreno lo acompañó su familia: su esposa, Rocío González; sus hijas, Irina, Carina y Cristina, junto a sus esposos. (I)

 

“Soy el presidente de todos, me debo a todos, respeto a todos. Trabajaré para que nadie, absolutamente nadie, se quede atrás. Sí, toda una vida”, añadió al anunciar los ejes centrales del proyecto que presentó en campaña sobre la ayuda a bebés, madres embarazadas, jóvenes, personas discapacitadas y de la tercera edad.

Sus promesas de campaña estuvieron presentes. Para infantes, cuidados prenatales, disminución de la desnutrición infantil, estimulación temprana, planes de vacunación, atención integral. Para las personas con discapacidad o enfermedades catastróficas o terminales, atención prioritaria.

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A los ciudadanos de la tercera edad, Moreno les garantizó cuidados gerontológicos y para quienes estén en estado de indefensión otorgarles una pensión mensual y seguridad social sin costo.

El mandatario dijo que se construirán 325 mil viviendas, de las cuales 191 serán entregadas sin costo a las personas en pobreza extrema y las restantes serán destinadas a quienes tengan una mínima capacidad de pago. Con esta medida también se busca generar empleos directos, no menos de 136 mil nuevos empleos.

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Precisamente, a quienes viven en pobreza extrema se subirá el bono hasta $ 150 mensuales, reiteró.

Agregó su promesa de facilidades de crédito, lucha contra el microtráfico, si es necesario, decretando emergencia nacional, refirió.

Segundo periodo de Glas en la Vicepresidencia. El vicepresidente de la República, Jorge Glas Espinel (d), tomó ayer posesión de su segundo periodo consecutivo en ese cargo. (I)

 

En el ámbito económico, dijo que se consolidará el cambio de la matriz productiva, atraerá el turismo y conformará un consejo consultivo productivo tributario.

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Además, se fomentarán las exportaciones apoyando también a los pequeños productores para que se pueda acceder a los mercados internacionales.

El presidente ofreció una política de diálogo con los sectores directamente involucrados en cada temática: militares, médicos, maestros, mujeres, artesanos y otros. Recordó que las “leyes son perfectibles”.

“El debate solo satisface el ego, no intenta encontrar soluciones. El diálogo no es el fin, es el camino para incluir la diversidad y entenderla”, manifestó Moreno.

En lo internacional, se fortalecerá la integración regional: Comunidad Andina, Unasur y Celac; en especial, el presidente Moreno dijo que continuará con el apoyo a los diálogos de paz entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional, reforzará la cooperación sur-sur, con énfasis en el cuidado del ambiente y el apoyo a los migrantes.

Correa con su hijo y esposa. Las dos hijas de Rafael Correa, que estudian en el exterior, no fueron al cambio de mando. (I)

Dijo que su relación con los medios será fresca y fluida, que para concretar el diálogo se requiere de liderazgo.

Respecto a su predecesor y su gestión, Moreno señaló: “Hoy concluye una época que deja al país con realidades y objetivos más claros, diez años de educación y salud, de entregar una nueva institución educativa cada doce días y una infraestructura médica cada diez días... Este proceso tiene un pueblo entero y tiene un nombre: Revolución Ciudadana... Gracias, Rafael, hasta siempre hermano querido”.

Dentro del discurso con el que empezó su mandato, Moreno destacó que los cambios son posibles y dijo no creer en refranes como “árbol que crece torcido nunca su rama endereza” o “genio y figura hasta la sepultura”.

La intervención del mandatario duró una hora y 18 minutos, desde las 11:28, casi una hora y media después de iniciado el acto de transmisión del mando presidencial de Rafael Correa a su persona. (I)

“Como lo ofrecí en campaña, firmaré un decreto ejecutivo de austeridad en el Gobierno... Vamos a sostener la dolarización, no tendremos una moneda paralela.