Sus hijos dicen que su estilo de vida, la alimentación y el clima de Cruzpamba le permitieron llegar al siglo de vida.

María Elina Fernández de Ayora, quien nació en 1917, festejó días atrás sus 100 años, en compañía de sus familiares.

“Pareciera que la condición del clima que recibió durante sus primeros años, su condición en el trabajo con quehaceres vinculados con la agricultura, fueron factores que pudieron haber influido para que viva tantos años”, dijo Amable Ayora, uno de los 8 hijos que procreó María Elina.

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La centenaria nació en la parroquia Cruzpamba, en el cantón Celica, de Loja. Su esposo fue el profesor Amable Ayora Bernal.

María Elina Fernández de Ayora ha tenido el privilegio de ver crecer a su familia, que la constituyen 40 nietos y 38 bisnietos.

Sus familiares cuentan que ella aún tiene lucidez mental, buen humor y le gusta ser muy sociable.

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“Ella tiene una habilidad en el cuidado personal, es muy comunicativa, a las personas las recuerda muy bien, camina, baila y hasta nos acompaña con dos o tres copitas de vino”, cuenta Amable Ayora.

La satisfacción de esta adulta ha sido ver que sus hijos alcanzaron un nivel profesional.

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Ayora sostiene que su madre tiene otros hermanos, sin embargo están con dolencias o enfermedades. (I)