Datos oficiales indican que el desempleo en Brasil alcanzó el nivel récord de 13,7% (14,2 millones de personas).

En este contexto, el país vivió este viernes una huelga general contra los planes de ajuste del presidente brasileño Michel Temer. La medida afectó a ciudades de los 26 estados y el Distrito Federal, con algunos incidentes entre manifestantes y policías.

La policía dispersó por la mañana con gases lacrimógenos a activistas que bloqueaban calles en Sao Paulo, Río de Janeiro y otras ciudades. Las mayores centrales sindicales convocaron a marchas en contra de los proyectos de reforma del sistema de jubilaciones y de flexibilización de los contratos de trabajo. Ambas iniciativas están en votación en el Congreso como parte del programa del Gobierno para enderezar las cuentas y sacar a Brasil de la peor recesión de su historia. (I)