Rosa Navas y Flora Espín, sentadas en una banca hecha con una tabla encima de dos troncos de árbol, con nostalgia recordaron que donde se levanta el parque Central de la parroquia Pilahuín antes era una plaza de tierra donde se comercializaban los productos de la zona, rodeada de casas construidas con piedra pishilata (de río), madera, tejas y bareque (compuesto de tierra aplastada con carrizos).

Señalaron que con el paso de los años las casas poco a poco se deterioraron, incluso resistieron al terremoto del 5 de agosto de 1949, ya que la mayor parte estaba en pésimas condiciones.

Pero los semblantes cambian, en sus rostros se dibujan sonrisas cuando comentan que por lo menos las viviendas consideradas patrimoniales de alrededor del parque fueron sometidas a restauración.

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Alejandro Tamaquiza, presidente de la Junta Parroquial de Pilahuín, informó que por gestiones ante el Instituto de Patrimonio Cultural se logró que tanto la iglesia como las casas aledañas al parque sean sometidas a restauración.

Indicó que en la parroquia hay el proyecto para impulsar el turismo conociendo las casas patrimoniales, luego recorrer el rostro de Cristo en Pucará Grande, Patococha de Yatzaputzán, aguas termales de El Salado y los páramos de Pilahuín en donde existen muchos lugares naturales.

Tamaquiza dijo que incluso se creó el Centro Cultural Pilahuín en donde además de talleres de música y pintura con gestores comunitarios se informa sobre gastronomía, vestimenta y vivencias de las comunidades.

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El presidente de la Junta Parroquial comentó que en Pilahuín existen 160 casas consideradas patrimoniales, pero que solo se restauraron 30. El Instituto ejecutó los trabajos en las partes externas, mientras que los propietarios lo hicieron en los interiores.

Comentó que se aspira a que haya una segunda fase para continuar con las obras.

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Por su parte, Espín señaló que al igual que ella muchas personas de la parroquia tienen casas antiguas, hechas de bareque, pero que no han sido sometidas a ningún trabajo de restauración y por esas razones algunas, como en su caso, las han sometido a obras, pero con materiales diferentes, perdiendo la esencia de cómo eran antiguamente. (I)