Durante el ataque terrorista del pasado viernes en Estocolmo, este quiteño de 27 años, que vive en Suecia desde el 2006 y trabaja de guardia de seguridad, fue parte de las acciones para controlar la situación.

¿Qué hizo al ver al camión avanzar por la calle?

Yo estaba sentado en el vehículo (de la empresa), recién había llegado a la calle Drottninggatan, cuando observé al fondo que venía un camión a toda velocidad frente a mí. Yo rápidamente me di cuenta de que se trataba de un atentado, porque comenzó a atropellar personas en el camino y llevarse obstáculos, la gente corría... Como estaba en la mitad de la calle, antes de llegar a Ahléns (tienda en la que se estrelló el camión) me dije: dejo mi carro aquí y así lo bloquea, pero unos 100 metros antes de que llegara hasta mí arrolló una estatua de león, perdió el control del camión y se metió en la tienda.

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¿Qué hiciste luego?

Bajé del auto y corrí a ayudar a los heridos y a evacuar a la gente, junto con más colegas que trabajan en seguridad.

¿Cómo fue ver esa escena?

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Todo pasa muy rápido y es muy difícil explicar qué sientes o qué pasa en ese momento. A nosotros nos dan el curso de guardia aquí en Suecia y nos enseñan cómo actuar en situaciones un poco más extremas, entonces mi reacción fue casi automática de ayudar y evacuar.

¿Cómo pudo escapar el autor (después capturado)?

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Al chocar el camión, entró en la tienda y comenzó a quemarse, salía mucho humo, había mucha gente. Yo supongo que salió del camión y en medio de personas corriendo y la confusión se metió entre la gente.

¿A la hora en que ocurrió había mucha gente?

Sí. También gente con hijos que habían corrido en diferentes direcciones y en un momento dado no sabían dónde se encontraban sus hijos, y eso era lo que más me impactó porque también soy padre de familia y yo me sentiría muy preocupado al no saber el paradero de mis hijos (...) me ponía en su lugar.

¿Cómo tomas que algunos te digan héroe?

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En parte bien y en parte un poquito raro, porque hubo muchas noticias que no concuerdan, por ejemplo, decían que yo había perseguido al camión y chocado, cuando no es correcto, así tienes una sensación extraña. Por eso he tratado de contactarme con medios para explicarles (...). En general me siento bien, no como un héroe, sino como que era algo parte de mi trabajo, junto con mis compañeros que se encontraban en el sitio.

¿Has recibido algún reconocimiento?

(En) mi empresa (...) me han dado ayuda psicológica y todo lo que se necesita en estos casos. Y por supuesto me han reconocido verbalmente muy bien, la gente también (...). Es emocionante, por una parte, haber ayudado a la gente de alguna manera y no haberte ido a la casa.

¿Habías vivido alguna experiencia similar por tu trabajo?

No de esta magnitud. Este tipo de acciones casi no suceden en Suecia (...) Un atentado siempre es diferente, más fuerte. (I)