Un monasterio del estado de Wisconsin (Estados Unidos) recibirá pronto a su cuarta religiosa millennial, la cual abandonó su profesión para dedicarse al servicio de Dios.

De acuerdo con el portal Aciprensa, Erin Wells, de 24 años, ingresará como postulante al monasterio Valle de Nuestra Señora, luego de haber obtenido un grado en Ingeniería Mecánica de la Universidad Estatal de Ohio. Seguirá los pasos de tres religiosas en esta comunidad perteneciente a la Orden cisterciense y que se encuentra en el Condado de Sauk.

La hermana Christina Marie (33) era entomóloga. Sor Mary Bede (30) anhelaba ser violinista profesional. La hermana Mary Benedicta (36) estudió para ser ingeniera aeronáutica.

Publicidad

Erin Wells llegará al monasterio el 21 de marzo, por un año. Venderá su vehículo, dejará posesiones y llevará apenas unas cosas, incluyendo una Biblia y su rosario. Luego se vestirá con su hábito blanco, portará un velo y tomará un nombre religioso. Dentro de cinco años decidirá si hace voto permanente.

“Fui a la universidad pensando que iba a ser ingeniera, trabajar para Honda, viajar a Japón, ser rica y escribir un libro que sería un best-seller”, contó a The Capital Times. Después dijo que “el Señor le reveló que la vida religiosa era abrazar al mundo como hija de Dios”.

La hermana Christina Marie era Chrissy Murphy cuando estudiaba insectos microscópicos y su rol en la descomposición del suelo en Puerto Rico. Acababa de graduarse de la Universidad de Colorado con una maestría, de entrar en una relación sentimental y buscaba un doctorado. “Todo estaba cayendo en su lugar, excepto que no tenía ninguna paz (...). Sabía que necesitaba darle una oportunidad a Dios”, aseguró.

Publicidad

La hermana Christina Marie entró al monasterio a los 24 años. Sus colegas y su novio quedaron atónitos. “La gente piensa que estás malgastando tu vida. Pero es realmente una gran ganancia, simplemente en un plano diferente. Requiere una visión de la fe para poder entender la vocación”, explicó.

La hermana Mary Bede, antes Abigail Berg, entró al convento a los 21. Renunció a su amor por los estudios y a su diligente interpretación de violín, una pasión que había marcado su vida desde los 3 años. Pudo llevar su violín al convento, pero no suele tocarlo seguido.

Publicidad

La hermana Mary Benedicta fue Starsha Johnson cuando estudió Ingeniería Aeronáutica en la Universidad de Illinois.

No sabía nada acerca de las monjas. A regañadientes asistió a una iglesia católica cuando estaba en la universidad. No estaba segura de lo que era la eucaristía, ni de cómo aproximarse a ella. Más tarde aprendió el propósito de la misa y cómo recibir la comunión. La hermana Mary Benedicta pensó: “¿Así que Dios no es solo una palabra de tres letras (God)? ¿Es una persona? Sabiendo eso, necesito intentarlo de nuevo”.

Y volvió, ahora para recibir la comunión. “Me sentí increíble. Estaba tan emocionada en el interior. Era impresionante. Fue un gran sentimiento”, dijo.

Entró en el monasterio cuando tenía 26, y 10 años más tarde es la directora de vocaciones y principal contacto para Wells y otros postulantes, pues pueden hablar con ella en cualquier rato durante el primer año. (I)

Publicidad

Apuntes
Monasterio

Fundación
El monasterio Valle de Nuestra Señora se fundó en 1957 cuando seis monjas de un convento cisterciense en Frauenthal, Suiza, llegaron el Día de Acción de Gracias. Luego viajaron a Wisconsin a petición de monseñor William O'Connor.