En Cuenca se realizó la tercera temporada teatral con presentación de obras continuas de corta duración, publicó ayer diario El Mercurio, de esta ciudad.

Se describe que cinco habitaciones del segundo piso de la Casa del Coco se convirtieron en salas de espectáculo para la tercera temporada de microteatro, que se inauguró la noche del pasado jueves.

El evento fue una propuesta escénica en la que se exhibieron obras teatrales de manera simultánea y a pocos minutos de terminar una se volvían a presentar, por lo que el público salía y entraba en otra sala.

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En un pequeño espacio donde el espectador se sintió parte del escenario empezó la obra Las criadas, que es una relación de amor-odio entre una empleada doméstica y la señora dueña de la casa.

La empleada anima a la señora a matar a su marido (el señor). La otra le reprocha su condición social, su pobreza, sus relaciones íntimas con el lechero… pero se descubrirá que la supuesta señora es en realidad otra empleada. La obra fue la tesis de grado de dos actores de la Universidad de Cuyo, en Argentina,

Un cambio de sala bastó para ver a Juan Estrella en una mezcla de teatro y magia. “Esto de la locura es un enredo”, proclama el actor-mago, que juguetea con una cuerda, la enreda, desenreda o cuelga al cuello, y dice: “Creo que la locura es cuestión de perspectiva”.

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Mientras, la cuerda que tenía tres nudos ahora tiene dos y luego ninguno, para dividirse, y él sigue filosofando. (D)