En una pequeña iglesia evangélica de paredes amarillas solo se escucha el murmullo de las oraciones, mientras familiares y amigos pasan este viernes frente al féretro de Siona Hernández, una de las 36 adolescentes muertas en un incendio de un albergue para menores en Guatemala.

Los que conocieron a la joven de 17 años dicen sentirse impactados por la tragedia ocurrida el miércoles en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, en San José Pinula, a 10 km de la capital, un centro que se encontraba en el ojo del huracán por un largo historial de abusos sexuales y otros maltratos.

"Estamos consternados, todavía no lo podemos creer. Lo que podemos ver es que hubo mano criminal de los que estaban cuidando esa área", dijo a la AFP el pastor de la comunidad religiosa, José Alpirez.

Publicidad

Numerosos arreglos florales rodean el ataúd blanco sobre el que hay colocada una fotografía de la niña, cuyo cuerpo es velado en Ciudad Peronia, un barrio violento colindante al sur con la capital.

Lea también: Aumentan a 31 las jóvenes muertas por incendio en refugio de Guatemala

La menor se encontraba recluida en el albergue por orden judicial, luego de escapar de su casa y ser localizada por las autoridades.

Publicidad

El albergue construido con capacidad para 400 jóvenes de ambos sexos, se hallaba hacinado con unos 800 menores. El incendio se produjo en el ala de las adolescentes, lo que explica que la totalidad de las víctimas fueran mujeres.

El último balance oficial del siniestro, ocurrido el miércoles, contabiliza la muerte de 36 jóvenes entre 14 y 17 años, mientras que 19 se encuentran en dos hospitales públicos, la mayoría en condición crítica y con pocas esperanzas de sobrevivir.

Publicidad

"Esto no tiene que quedar impune, la ley está para cumplirse", sentenció Alpirez.

Pocas esperanzas para sobrevivientes

En el lugar murieron 19 jovencitas y las demás han ido falleciendo en los centros médicos a causa de las quemaduras. Seis de ellas fueron dadas de alta médica y están bajo el resguardo de las autoridades.

Debido a la gravedad de las lesiones de las 19 niñas que siguen en cuidados intensivos, son pocas las probabilidades que tienen de sobrevivir, afirmó el director del hospital San Juan Dios, Antonio Villeda.

Publicidad

El galeno aseguró que las probabilidades de vida son de un 20% porque están quemadas en casi todo el cuerpo y tienen daños en las vías respiratorias, un situación que casi siempre es mortal.

El jueves, el presidente Jimmy Morales ordenó cerrar temporalmente el refugio mixto que alberga a menores de hasta 17 años, víctimas de abandono y violencia doméstica, que cometieron alguna infracción o fueron rescatados de las calles, entre otros motivos.

La Procuraduría de los Derechos Humanos, una de las instituciones que había advertido desde hace varios años del horror en que vivían los menores, asegura que las jóvenes estaban encerradas bajo llave en un salón cuando se propagó el fuego.