Angie de la Cruz y su hijo de dos semanas de nacido estaban en la habitación cuando escucharon un fuerte ruido. Ella tomó en brazos al bebé y salió rápido sin imaginar que el techo quedaría en el piso. Sucedió en la parroquia José Luis Tamayo, conocida como Muey.

En medio de la visita de turistas, ello se registró con la lluvia que ayer soportó la provincia de Santa Elena que estuvo acompañada de fuertes vientos, dejando daños en varias viviendas de Salinas.

Las precipitaciones que han sido continuas en Santa Elena incluso han reactivados ríos que han aislado a poblados del norte y sur de la península.

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En la parroquia José Luis Tamayo, daños en techos de dos viviendas asentadas en el barrio 24 de Septiembre.

“Mi hija estaba sola, luego que pasó todo llamó a pedir auxilio, por suerte nadie quedó herido”, explicó María del Pezo, dueña de la casa afectada.

El orificio provocó la inundación en la vivienda. Durante varias horas, la familia evacuó el agua y colocó tinas en el área afectada. Cuando se detuvo la lluvia, cubrieron con eternit la parte dañada.

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Juan Carlos Tigrero aseguró que pasaba por el sector cuando vio que se formó un remolino de viento y alzó un techo.

En La Libertad, varias calles resultaron anegadas como la avenida Eleodoro Solórzano, donde buses debieron disminuir la marcha ante las lagunas de agua.

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En otros balnearios, las carpas instaladas en la Ruta del Spondylus como Montañita también se registraron lluvias durante la mañana de ayer. Allí no se afectó el turismo. (I).