Antonio A., y un primo, Sebastián H. fueron hallados culpables por el delito de violación sexual contra una mujer en un motel de Milagro, en mayo del 2016. Después de nueve meses, el Tribunal Décimo Cuarto de Garantías Penales del vecino cantón tomó la resolución la noche del martes. 

Pese a la sentencia, el padre de Antonio, Hermes A., afirmó sentirse con la frente en alto porque conoce que su hijo es inocente, dijo. “Nunca voy a dudar de él. Seguiremos en pie de lucha defendiéndolo”, afirmó el padre del joven conocido como la Bala, en el restaurante que lleva el seudónimo de su vástago, en Sauces 9.

La familia del joven de 28 años, que se dio a conocer al competir en un reality televisivo, ya prepara con sus abogados la apelación del fallo, que fue de 29 años con 4 meses de prisión, la publicación del fallo en medios de comunicación, terapias psicológicas, disculpas públicas y una compensación económica de $ 3.200 a la joven, detalló el fiscal Édison Daquilema.

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“Es una sentencia desproporcionada. No se pudo comprobar que haya existido la violación, a través de pruebas, con amenaza o intimidación, ya que para que eso se configure debe haber acceso carnal con fuerza, violencia, golpes, hematomas, que ella esté privada de sus facultades mentales y nada de eso pudo ser demostrado por la Fiscalía”, señaló la abogada de Antonio, Patricia Casula.

A esto, el fiscal y el abogado acusador, Joselito Argüello, coincidieron en que la agresión sexual fue comprobada en los exámenes médicos.

En mayo del 2016, Antonio, Sebastián y cuatro mujeres habrían salido de una discoteca y dirigido a un motel del sur de Milagro. Ahí, tres mujeres se retiraron y se quedaron los dos hombres y la mujer, presuntamente agredida.

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“No hubo lesiones, no hubo hematomas, no hubo gritos de auxilio, rasguños, nada que pueda corroborar que ella haya sido víctima de una violación... la mujer provocó la situación de riesgo , fue ella la que se dirigió al motel, ella empezó con juegos eróticos, en todo caso si hubo riesgo no consentido lo causó ella...”, aseguró la abogada Casula.

Sobre si la mujer acudió al motel bajo su voluntad, el abogado acusador argumentó: “El objeto del juzgamiento es la violación sexual... Si quiso ir o no es irrelevante”.

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Según el Código Orgánico Integral Penal, este delito está estipulado con pena privativa de libertad de hasta 26 años, la que puede incrementarse un tercio más en caso de existir agravantes, como lo ocurrió en este caso al participar dos personas.

Lo sucedido a la Bala le cambió la vida a la familia A. N. Los padres de Antonio dejaron sus trabajos y casa en su natal Cuenca para defender a su hijo. Le reconforta saber el apoyo de la gente, que se unió en una marcha el martes luego de la sentencia. (I)