Con dos candidatos festejando cerró la jornada de elecciones

Solo el círculo de funcionarios más cercano del gobierno de Rafael Correa fue el que acompañó al binomio presidencial de Alianza PAIS, Lenin Moreno y Jorge Glas, a recibir los primeros resultados de los comicios de ayer, en uno de los salones del hotel Quito, en donde retumbaban los gritos de “una sola vuelta”.

En un escenario montado con pantallas gigantes, luces y las consignas de la militancia, Moreno recibió un beso en la frente de Correa y felicitaciones del candidato a asambleísta José Serrano, hasta que llegó Glas, con el que levantaban los puños celebrando un posible triunfo en primera vuelta.

Así llegaba Moreno al final de la tarde. El festejo fue horas después.

En la avenida de Los Shyris, frente a la sede de AP, se montó una gran tarima, también con pantallas gigantes y orquestas que entretenían a cientos de militantes que llegaron a respaldar el binomio.

Al interior de AP, sus líderes como Correa, Moreno, Glas y otros dirigentes esperaban los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE).

A las 22:00 Moreno decidió salir y acompañado de los candidatos a la Asamblea, Glas y su esposa, planteó dos escenarios: alcanzar el 40% para declararse triunfadores o seguir en la “lucha” en la segunda vuelta.

“Solo falta cruzar los dedos” dijo a los simpatizantes.

Explicó que se demoró en salir a saludar porque de “forma bastante rara cuando empezaron a ingresar los datos de Manabí”, se registraron fallas en la pagina web del CNE, pero alentó a los asistentes diciéndoles que un “asesor” les decía que van a alcanzar el 40%.

Finalmente se puso a cantar y luego ingresó de nuevo a la sede de AP.

En este acto el presidente Correa ya no apareció.

Se informó que habría un pronunciamiento a la medianoche, mientras tanto una orquesta mantenía bailando a los pocos asistentes que quedaron.

Así terminaba la jornada de Moreno, que empezó votando pasadas las 10:00 en la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE), el mismo recinto donde votó el candidato a la Vicepresidencia de CREO, Andrés Páez, junto a Guillermo Lasso, pero no coincidieron.

A las 14:30 acompañó a Glas a votar en el colegio 24 de Mayo. En ese lugar se enfrentaron los gritos tanto de apoyo como de rechazo de ciudadanos que les gritaban ‘¡fuera, Correa, fuera!” y hasta insultos.

A las 16:30 se trasladaron hasta el hotel Quito, en donde el oficialismo prefirió conocer los resultados a boca de urna elaborados por la encuestadora Opinión Pública Ecuador, que le daba un porcentaje del 42,9%, y que fueron divulgados por los canales incautados TC Mi Canal y Gama.

“¡Ganamos las elecciones. Es un millón de ecuatorianos más que votaron por continuar con la revolución!”, decía Moreno eufórico. (I)

“Hay segunda vuelta, ecuatorianos” fue la frase con la que abrió el festejo el candidato por CREO-SUMA, Guillermo Lasso.

El aspirante bajó al salón Isabela del hotel Hilton Colón, en Guayaquil, para comunicar los resultados, a las 17:00. “Más del 60% de los ecuatorianos dijeron No al Gobierno, ellos quieren un cambio”, señaló.

También hizo un llamado público a los líderes de la oposición. “Es tiempo de una unidad más grande, por eso le pido a Cynthia Viteri y a Paco Moncayo, al PSC, a Pachakutik y a la Izquierda Democrática trabajar juntos”, manifestó.

Cuatro horas después, y tras pasar por las pantallas de distintos canales, un Lasso sonriente reapareció en el salón del Hilton para convocar a sus simpatizantes a supervisar el conteo oficial que realiza el Consejo Nacional Electoral (CNE) y aseguró que desde hoy comenzará la campaña para la segunda vuelta, no sin antes agradecer los apoyos que, por teléfono, le expresaron los candidatos Viteri, Abdalá Bucaram Pulley y Patricio Zuquilanda.

“Estas manos están extendidas para darle un abrazo a cada ecuatoriano que sueña con el cambio, están extendidas en señal de apertura incluso a las bases de Alianza PAIS, que también están desencantadas”, dijo el candidato de CREO, antes de retirarse del lugar, agradeciendo a sus contendientes de la oposición, a sus colaboradores, a su familia, y ondeando una bandera de Ecuador.

Pero su día se inició más relajado. Pasadas las 07:00 llegó hasta el aeropuerto de Guayaquil, para tomar un vuelo privado hacia Quito y acompañar a votar a su compañero de fórmula, Andrés Páez.

Volvió a la ciudad a las 11:30, a un hangar privado del aeropuerto de Guayaquil, donde lo esperaban cuatro de sus cinco hijos. Y cuando se aprestaba para ir a votar recordó un detalle: olvidó su cédula en el Hilton.

A las 12:30, un Lasso sonriente salió de uno de los ascensores mostrando su cédula y dijo: “Ahora sí a votar”.

La caravana de vehículos se enrumbó a la Unidad Educativa Batalla de Tarqui. A tres cuadras de llegar, el candidato tuvo que bajar por el tráfico.

El sol quemaba, la humedad era insoportable, pero Lasso saludó y se tomó fotos con sus simpatizantes.

Al llegar al lugar de votación se formó una trifulca entre medios, periodistas y militares que pugnaban por entrar al aula donde sufragaría.

Lasso entró, pidió calma e hizo todo el proceso para sufragar. Antes de depositar la papeleta la mostró e indicó: “Hay que votar por el cambio”.

Un Lasso sudado y cansado acompañó a su esposa, María de Lourdes Alcívar, a sufragar en el colegio San Agustín.

Cuando salió del recinto decidió emplasticar los certificados de votación y a la persona que le ofreció sus servicios le canceló 20 dólares. (I)

Alianza PAIS celebró el exit poll de Opinión Pública Ecuador que daba a Lenin Moreno el triunfo en una sola vuelta. En cambio, el trabajo de Cedatos puso a Guillermo Lasso, de SUMA-CREO, en una segunda vuelta. Los dos festejaron con sus bases.