El noreste de EE.UU. se cubrió de nieve ayer, apenas días después de que una tormenta invernal feroz trajera 48 centímetros de nieve a la misma zona, así como ventiscas y temperaturas gélidas.

Las autoridades desde Maine hasta el estado de Nueva York pidieron a la población ejercer cautela extrema mientras se vaticinaba una precipitación de hasta 60 cm de nieve.

Al menos una muerte fue vinculada con la tormenta invernal, en Pennsylvania.

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Fueron canceladas las clases en varias escuelas de la región, inclusive en Boston y en el estado de Nueva York, desde Albany hasta las afueras de la ciudad de Nueva York. Varios vuelos en la zona fueron cancelados por el clima.

Lenore Correia, una meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional de Taunton, Massachusetts, indicó: “Es una tormenta invernal considerable, pero nada que no hayamos visto antes”.

En la otra costa, en California la preocupación era la represa de Oroville, donde casi 200.000 personas fueron evacuadas ayer en el norte del estado ante el riesgo, ya reducido, de que una falla en la represa, la más alta del país, causara fuertes inundaciones en poblados de las zonas bajas. (I)