Michael Alejandro Chiriboga Espinoza, de 31 años, departía con amigos en una de las esquinas del barrio Garay, en el centro sur de Guayaquil, cuando dos sujetos en motocicleta llegaron para dispararle a quemarropa, la noche del miércoles 1. Ocurrió en Medardo Ángel Silva y Guerrero Martínez.

La víctima recibió al menos seis tiros, según familiares que la mañana de este jueves exigían justicia y aseguraban desconocer quién actuó con saña contra su pariente, padre de cuatro niñas, la mayor de 12 años.

Testigos señalaron que el pasajero de la moto lo sorprendió por la espalda supuestamente diciéndole: “Ves cómo pagas”, que Michael alcanzó a voltearse antes de recibir los tiros.

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Juan Duarte, de 38 años, cuidador de carros en esa esquina, resultó herido. Una bala se le alojó en el hombro, señaló su papá, del mismo nombre y también guardia barrial, con más de 40 años en el sector, afirmó.

Luis Estupiñán, primo de la víctima mortal, exigía la captura del o los criminales y aseguraba que su familia no era conflictiva. Corroboró lo dicho por el fiscal que actuó en el levantamiento del cadáver, respecto de que su familiar había estado privado de la libertad. Sostuvo que de aquel episodio había pasado más de un año.

María Espinoza, mamá de Michael, mencionó que unas malas amistades lo vincularon a cuestiones al margen de la ley, que su vástago, por haber sido vinculado, remarcó, pasó recluido algunas semanas. Manifestó que ahora este trabajaba en la elaboración de productos químicos.

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Cindy Espíndola, pareja de la víctima mortal, se encargó del retiro del cadáver en el Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses. (I)