El parlamento turco respaldó un plan para fortalecer los poderes de la presidencia, allanando el camino para un referendo sobre el tema que, de ser aprobado, podría permitir al presidente Tayyip Erdogan gobernar hasta 2029.

Erdogan dice que la reforma proporcionará estabilidad en el país candidato a entrar a la Unión Europea en un momento de turbulencias e impedirá un retorno a las frágiles coaliciones del pasado. Sus opositores temen que los cambios propuestos traigan un gobierno cada vez más autoritario.

Erdogan pidió a sus partidarios que trabajen “día tras día” en la campaña del referendo.

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Kemal Kilicdaroglu, líder del principal grupo de la oposición, dijo que su partido lucharía contra los cambios en la campaña del referendo.

La reforma permitiría al presidente emitir decretos, declarar el estado de emergencia, nombrar ministros y altos funcionarios y disolver el parlamento, unos poderes que según la oposición desequilibran el sistema a favor de Erdogan.

Los críticos acusan a Erdogan de un creciente autoritarismo con arrestos y destituciones de decenas de miles de jueces, policías, militares, periodistas, tras la fallida intentona golpista. La organización Human Rights Watch dijo a AFP que esta reforma “concentra absolutamente todos los poderes en manos del presidente”. (I)