Era un amanecer inusual en la cooperativa Santiaguito Roldós, en el sur de la ciudad. La conmoción de familiares de 19 moradores de ese sitio que murieron en un accidente de tránsito en la vía Yaguachi-Jujan, la noche del viernes, acongojaba ayer al vecindario. El choque entre un expreso escolar, otro de la coop. Ventanas y un auto Grand Vitara dejó en total 20 muertos y 38 heridos.

En la Santiaguito había abrazos fraternos, pero también lágrimas de solidaridad, había preguntas sin respuestas. Todos iban a un retiro espiritual católico en Montalvo, Los Ríos.

En la manzana 1321, el llanto desgarrador de Dora Vásquez por haber perdido en el accidente de la noche del viernes a su hijo, William Borja, era consolado por familiares del joven que pereció junto con su esposa, Mariuxi Hurtado, y su hija de tres meses de nacida.

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Melania Monroy, prima de William, lo recordaba como un joven alegre que se había acercado a la Iglesia católica motivado por su esposa, con quien procreó otra hija, de dos años.

Ese dolor se profundizó entre los familiares y vecinos, cuando pasadas las 15:00 empezaron a llegar los primeros féretros desde la morgue de Milagro al colegio José María Egas. Algunos fueron llevados a los domicilios.

En el anfiteatro de Milagro, Jorge Jurado no pudo contener su llanto al ver cómo colocaban el féretro de su hija, de 17 años, en un camión junto a seis más. “Mi Vicky, por qué te fuiste, mi chola”, sollozaba abrazado a su esposa, Apolonia González.

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En el expreso viajaban sus dos hijas, una resultó herida. Al verla en la morgue, comentó González, solo pudo reconocerla por su ropa y un lunar.

Como ellos, los familiares se acercaban a los ataúdes, que tenían los nombres escritos con marcador a un lado y en un papel pegado en la parte superior, y rompían en llanto.

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María Castro no podía creer que su hija, de 32 años y madre de cinco hijos menores de edad, era una de las 20 víctimas. El jueves fue la última vez que la vio, en el cumpleaños de su nieta. “El esposo no quería que vaya, pero a ella desde pequeña le gustaba ir a esos retiros”, dijo.

Máximo Castro perdió a sus dos hijas, de 19 y 16 años y a su cuñada. Otro de sus hijos está en coma, en un hospital de Guayaquil. Mientras, Magdalena Abarca deberá sepultar a los cinco fallecidos de su familia Izquierdo Abarca. No pudo despedirse de su esposo, Benito Izquierdo; hijos, Julianna (24) e Israel (17), su nieta (4) y sobrino (17). “Ellos estaban encantados de ir al retiro, yo iba a ir hoy (ayer). Es un dolor muy grande, pero tengo el consuelo de que están con Dios”, dijo. (I)

Detalles
Las Víctimas

Del siniestro
La Comisión de Tránsito del Ecuador identificó como fallecidos a Tatiana Arteaga Zambrano, Julio Verdezoto Moreira, Israel Izquierdo Abarca, Benito Izquierdo Cedillo, Alberto González, Janina Izquierdo Abarca, Rafaela Izquierdo Tite, Estela Quintero Rodríguez, Santiago Noboa Dután, Ángel Abarca Muñoz, Dévora Castro Agila, Esther Castro Agila, Lady Burgos Castro, Kerly Yumbla Bohórquez, Segundo Rivadeneira Montaño, Victoria Jurado González, Juliana Izquierdo Jurado, William Borja Vásquez, Mariuxi Hurtado Rivadeneira y Corina Borja Hurtado. Los familiares de esta última dijeron que Brisa Borja fue quien pereció.

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