A 20 de 21 artículos que formaban parte del veto del Ejecutivo a la Ley de Cultura se allanó este martes la Asamblea Nacional, con el voto de 84 legisladores del oficialismo; y estará vigente con su publicación en el Registro Oficial.

De 112 asambleístas presentes, 28 se abstuvieron de aprobar este articulado, cuyo primer debate se dio el 8 de diciembre del 2009.

La presidenta de la Comisión de Educación y Cultura, Ximena Ponce (Alianza PAIS), ponente del proyecto, explicó que hay ocho artículos que se refieren a la declaratoria de bienes patrimoniales.

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Uno de esos artículos señalan que recibirán incentivos y garantías los ciudadanos que tengan bienes y objetos que corresponden a la época colonial y republicana, construidos hasta el año 1940, “siempre que tengan un valor histórico que proteger”, explicó Ponce.

También se establecieron cinco incentivos tributarios para los bienes de uso artístico.

Los estatutos de las organizaciones artísticas serán previamente aprobados por el Ministerio de Cultura.

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En el caso de elección de las autoridades de la Casa de la Cultura, y sus núcleos deberán hacerse de “manera universal”, según la nueva ley.

Las elecciones “no se harán por grupos, sino que la asamblea o la ciudadanía que se acerquen a la votación, determinarán quiénes lo representarán”, explicó la legisladora de AP.

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A estas objeciones se allanó el pleno; sin embargo, con otra votación, el oficialismo no acogió la postura de la Presidencia de la República de eliminar el Instituto de idiomas, ciencias y saberes ancestrales, con 98 votos afirmativos y 13 abstenciones.

El asambleísta del movimiento Cambio-PSC, Luis Fernando Torres, expresó su inquietud respecto de la calificación de bienes patrimoniales. “No se puede inmovilizar a una persona porque su inmueble fue construido antes de 1940. Es oportuna, pero insuficiente porque no resuelve los problemas de quienes poseen bienes patrimoniales”, agregó. (I)