Monserratt Bustamante, docente universitaria de 40 años, se estrena en la política partidista como aspirante a la Vicepresidencia por el Acuerdo Nacional por el Cambio, junto a Paco Moncayo. Pero aclara que no es ajena a esta actividad porque creció entre mítines y caravanas: su padre, Jorge Chino Bustamante, fue diputado por Loja años atrás bajo la bandera roldosista.

¿De dónde surgió su nombre para completar el binomio con Moncayo?
Surge de la academia. Unas semanas antes de la inscripción estuve en el evento ‘Consenso Ecuador’, de la Cámara de Comercio. Estaban Paco, (el alcalde) Jaime Nebot y otras personalidades. Fui porque Roberto Passailaigue, canciller de mi universidad (Ecotec), me invitó. Lo vi, y eso fue todo. La academia propuso nombres porque el perfil del binomio que Paco buscaba era una mujer con experiencia en el ámbito social y educativo, e identificada con los jóvenes. El Acuerdo pensó que yo era la indicada. Me contactaron, me preguntaron... ¿y cómo decir que no?

La Carta Magna dice que el vicepresidente hará lo que le asigne el presidente. ¿Qué asumiría usted?
Me haré cargo del Frente de educación, social y ambiental, que son mi fuerte. Si Paco me necesita en otras áreas lo haré, somos un equipo, nos complementamos. Paco es el estratega, el estadista, de un corazón maravilloso y amor por la patria; y yo soy puro corazón por la educación.

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¿Y qué propone?
Nosotros no venimos a refundar al país, sino a arreglar lo que se necesite y a mantener lo bueno... En la educación vamos a reformar la Ley Orgánica de Educación Superior, porque el futuro de un estudiante no lo puede determinar un examen, sirve para evaluar las competencias y conocimientos, y a partir de eso identificar lo que el joven quiere estudiar; planteamos regresar al bachillerato diversificado porque el unificado lo que hace es darle de todo al chico y no lo orienta; también queremos devolver la autonomía a las universidades, manteniendo la calidad, porque esto permite que haga análisis e identifique las ofertas laborales para que los chicos salgan con empleo.

¿En lo social?
Fortalecer los derechos de las mujeres, que aquellas que sufren de maltrato ya no se queden en silencio por miedo; otra cosa que haremos será acortar la brecha de salarios entre hombres y mujeres... Y en esto la educación es un eje transversal, si generamos espacios donde las mujeres puedan conversar, empoderarse y crear programas de monitoreo de estas situaciones podrán recuperar sus derechos.

En el Plan de Gobierno de Moncayo se menciona la despenalización del aborto. ¿Usted apoya eso?
Cuando se trata de violación de un familiar o una persona discapacitada. Tenemos que ser conscientes de que hay que respetar los derechos de las mujeres, no somos cosas, pero siempre con consensos.

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¿En el área ambiental?
Generar proyectos que permitan que lo ambiental haga simbiosis con la agricultura; que por la educación aprendamos, desde niños, a cuidar el ambiente, a no contaminar... El petróleo no nos va a durar mucho, hay que empezar a vivir del conocimiento, de la agroindustria. En la minería, crear políticas que nos permitan generar sostenibilidad, centrándonos en el ser humano.

A las autoridades locales Moncayo les dijo que hay que ser “realistas”, pues seguiremos siendo extractivistas...
Extractivistas con políticas ambientales... Pero no podemos ser extractivistas todo el tiempo porque estos recursos se van a acabar y, por tanto, hay que hacer un cambio a la agroindustria verde. (I)

Yo siempre supe que algún día sería ministra de Educación de mi país, me he estado preparando para eso toda la vida... Ahora Paco Moncayo me propone que sea vicepresidenta, yo estoy lista para servir.