Nueve personas murieron por sobredosis de fentanilo, un potente sedante, en la ciudad canadiense de Vancouver durante la noche del jueves, informó el viernes su alcalde, Gregor Robertson.

Flanqueado por el jefe de Policía de la ciudad y otros funcionarios del área de emergencia, Robertson alabó que existan servicios como las salas para toxicómanos, pero dijo que se necesitan urgentemente más opciones de tratamiento.

"Es una época dura en Vancouver y es difícil ser optimista cuando aún no hemos tocado fondo", reconoció Robertson.

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"¿Se pueden imaginar nueve personas muriendo por cualquier razón en nuestra ciudad?", preguntó por su parte el jefe de de Policía, Adam Palmer, quien también instó a aumentar la ayuda a los adictos.

Canadá ha estado tratando de contener una crisis de sobredosis que se cobró la vida de 2.000 personas el año pasado, aunque se espera que esa cifra sea superada este año.

En Vancouver han fallecido en promedio 15 personas al mes por sobredosis y la Policía investiga actualmente 160 muertes, según Palmer.

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El Ayuntamiento aprobó un alza de 0,5 puntos porcentuales del impuesto a las propiedades esta semana para ayudar a combatir la crisis de sobredosis de fentanilo.

Los fondos van a apoyar a los trabajadores del sector de emergencias, de refugios y otros servicios de reducción de daños. (I)