Para la emprendedora Paula López participar por segunda ocasión en el evento ‘Manos de Artista’, realizado por la Asociación de Voluntariado Educativo, tiene doble motivación. La primera, involucrarse directamente con la labor que lleva el grupo con más de doscientos estudiantes beneficiados, y la segunda, promocionar su marca de pijamas Mime.

Ese era el sentir de las 72 expositoras que se congregaron el jueves y ayer en el evento celebrado en Plaza Lagos y que lidera la asociación con 26 años de creación. Esta agrupación busca continuar su gestión de ayuda a la educación de niños de Salitre, La Aurora (Daule) y el norte y sur de Guayaquil.

“Superbién me parece, doble motivo participar más ahorita en esta época de Navidad”, contó López, emprendedora de 27 años.

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La presidenta de la Asociación, Magdalena Garzón, dijo que el evento tiene doble valor ya que involucra al joven y al adulto emprendedor con los más desprotegidos. Y es que justamente con estos fondos que cada expositora da a la asociación por un espacio en el evento, la Asociación brindará este lunes un festejo navideño a 360 niños de cuatro escuelas de los poblados a donde llega su labor social.

“Las profesores son felices con nuestra presencia, tratamos de hacer como si fueran nuestros hijos”, señaló Garzón, quien remarcó que entre las voluntarias hay profesionales como psicólogas y terapeutas.

Con los fondos recaudados, la asociación llevará a los niños de las cuatro instituciones a conocer sobre procesos de reciclaje, a ver una película y visitar el museo miniatura del CinemaMalecón, en el centro de Guayaquil.

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Esta actividad más un bingo son las dos actividades con las que solventan el bono de apoyo educativo que entregan anualmente a los padres de los niños más aplicados.

Su enfoque va para gastos como mochilas, zapatos, entre otros, dice Magdalena Garzón, presidenta de la asociación que además tiene de líderes a Rocío de Fayad, María Elena de Azar y Leticia Soriano.

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La ayuda no queda allí. En las escuelas gestionan remodelación de áreas, brindan charlas de valores, dan terapias psicológicas o promueven donativos.

“Les inculcamos el respeto al ser humano, hablamos de las drogas, cómo tratar a los padres...”, comentó.

Para los interesados en sumarse como voluntarios o entregar donativos las puertas están abiertas en sus oficinas, en Bolivia 507 y Chile. Buscan incrementar el número de beneficiados. (I)