“Pido que traten de detener a esos delincuentes. Que los busquen, que los encuentren, que reciban la pena máxima. Me han dejado devastada. Él era mi todo”, manifestó este jueves Wendy Carpio, esposa del guardia asesinado, la tarde del martes último, al tratar de impedir que le robaran a una mujer en el centro comercial Parque California, en el km 11,5 de la vía a Daule, en el norte de Guayaquil.

Junto a ella estuvo el jueves Ricardo Vanegas, presidente de la compañía de seguridad para la que trabajaba, desde el 2004, Segundo Bravo Cedeño, el guardia asesinado. Él contó, y luego mostró videos, que la cartera de la mujer que se llevaron los delincuentes no tenía el dinero que los sacapintas pensaban que llevaba.

En los videos se ve a dos hombres, con gorras, en el interior del centro comercial (uno con jean azul y camisa a cuadros y el otro con camiseta blanca y pantalón negro), que, por separado, se acercan a la mujer cuando esta llama al guardia para que le diera protección. Luego se los ve salir.

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Vanegas aseguró que están dispuestos a dar una recompensa, de la que aún analizaban montos, por la información que se obtenga de los antisociales.

Édison Barrera, comandante de la zona 8 de la Policía Nacional, dijo el jueves que un hombre de 18 años y una mujer de 30 fueron detenidos como presuntos sacapintas, porque sus físicos coincidirían con las grabaciones de los videos. (I)