El Fondo de Liquidez construido con los aportes de la banca privada llegó en septiembre de 2016 a $ 2.359 millones.

El manejo de estos recursos registra un cambio de reglas tras la emisión de dos resoluciones de la Junta de la Política Monetaria y Financiera: la 298-2016-F y la 303-2016-F.

La obligación de repatriar entre $ 300 y $ 400 millones por parte de los bancos privados, así como la posibilidad de prestar hasta 20% de estos recursos ($ 471 millones) a las cooperativas, son los principales efectos de las medidas, según expertos en el tema.

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Es que en la resolución 303-2016-F se cambia la manera de calcular el coeficiente de liquidez doméstica.

Hasta ahora, el Fondo de liquidez administrado por el Cosede –que garantiza los depósitos de la banca– había sido considerado parte de esta liquidez, pese a que esos recursos se encuentran en el exterior.

Sin embargo, con la resolución, este ya no es parte de la liquidez doméstica, sino de la externa y, por tanto, varios bancos se quedan sin cumplir la cuota del 60% para ese rubro a menos que traigan dinero del exterior. Ese dinero debe ir directamente al Banco Central del Ecuador, explicó José Hidalgo, director de Cordes.

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Para Fausto Ortiz, exministro de Finanzas, ese dinero que obligatoriamente deberán traer los bancos son recursos nuevos que antes el BCE no tenía en su poder.

Esto, a diferencia de lo que ocurre con el encaje bancario. Es que en la Resolución 302-2016-F se incrementa del 2% al 5% el encaje bancario, pero que en la práctica no genera nuevas transferencias de dinero al Central. Actualmente, la banca está “sobreencajada” (tiene más del requerido).

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En este tema, Hidalgo opinó que no resulta lógico obligar a la banca a traer más recursos cuando actualmente está bastante líquida porque la demanda de créditos no ha logrado despegar como se esperaba.

Entre tanto, en la resolución 298-2016-F se permite que haya préstamos entre fideicomisos de fondos de liquidez para la banca y las cooperativas.

Esto se da luego de que el Cosede, mediante su resolución 019 del 2016, resuelve calificar como reservada información relacionada con este dinero: montos de los fondos, así como del Estado de situación de los fideicomisos. Según Hidalgo, lo ideal sería que cada fideicomiso se encargue de financiar a cada sector aportante.

Pero ¿cuál es la necesidad de tener mayor liquidez en el Banco Central al momento? Para Hidalgo, diciembre es un mes que requiere importante liquidez a nivel de Gobierno especialmente por el pago de décimos en el sector público.

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En este sentido, dijo, existe una percepción de que el BCE podría entregar los nuevos recursos en calidad de préstamo como lo ha venido haciendo al Ministerio de Finanzas. Esto como parte de la gestión de liquidez del organismo.

Hasta el 25 de noviembre pasado, el Banco Central mantenía un saldo de $ 4.157 millones entregados a Finanzas por este rubro. (I)

Otra medida
Sector Público

Nueva disposición
Las ent¡dades del sector público no financiero no podrán mantener depós¡tos e inversiones financ¡eras en el exterior, sin contar con la autorización de la Junta.

Plazo
De existir estos rubros sin autorización, la disposición es reingresarlos de manera obligatoria al país hasta el 31 de diciembre de 2016 y depositarlos en el BCE.