El desprendimiento del costado de una segunda casa ubicada en el sector de San Blas, centro de Quito, obligó al cierre total de la avenida Pichincha.

El nuevo colapso se dio casi cinco horas después del primero, pero esta vez se dio en la vivienda que estaba atrás de la casa inicialmente accidentada.

Un bombero y un agente metropolitano de tránsito resultaron afectados con heridas menores. Una motocicleta quedó completamente aplastada por el derrumbe de adobes y madera.

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El secretario de Seguridad del Municipio de Quito, Juan Zapata, aseguró que se analiza la posible responsabilidad en el hecho del constructor que realizaba la obra de regeneración urbana en el lugar.

Al menos una de las dos casas afectadas deberán ser demolidas de una forma controlada, dijo Zapata, pues existe aun riesgos sobre la vía y los moradores de la zona.

Las tareas exteriores de limpieza aun continúan, pero, por seguridad, se ha suspendido el desalojo de los enseres de las habitaciones que aún están completas.

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Nuevo desprendimiento de casa colapsada obliga a cierre total de avenida Pichincha. Limpieza continúa en la zona. @eluniversocom pic.twitter.com/UH2RyhN131

Primera vivienda

Cuatro familias afectadas y un número aún no calculado de pérdidas económicas dejó este lunes el colapso de una parte de una casa de tres pisos ubicada en la esquina de la avenida Pichincha y calle El Vergel, en el Centro Histórico de Quito.

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Poco antes de las 06:00 se registró el colapso de la vivienda de construcción mixta (adobe, teja y madera), en donde sólo se encontraba Suttner Intrigó y sus cuatro hijos menores. El grito de una vecina la alertó de lo que sucedía y pudo sacar a sus hijos ilesos de la vivienda.

Cristian Rivera, de la Secretaria de Seguridad del Municipio de Quito, aseguró que se analizan las causas que originaron el desplome de la vivienda y en la tarde podría existir un informe. Lo que inmediatamente se hizo es activar el Fondo de Emergencia para ayudar a las dos madres y sus hijos, mientras que para las dos familias restantes se les habilitó una bodega para guardar los enseres que empezaron a retirarse de la otra parte de la vivienda que no resultó con daños.

El capitán Freddy Silva, del Cuerpo de Bomberos de Quito, explicó que lo que sucedió fue un colapso suspendido. Aparentemente en el sitio se estaba dando la construcción de un muro portante, el cual se viró y todo lo que estaba anclado al muro se desprendió.

El propietario de un almacén de confección de ropa deportiva que resultó afectado por el colapso, Fernando Sagnay, espera que alguien se haga cargo de los entre $80.000 y $100.000 en pérdidas que le produjo este colpaso. Su almacén quedó aplastado debajo de los escombros.

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Alexandra Espinosa, esposa del propietario de la vivienda accidentada, aclaró que desde hace dos semanas trabajadores del Municipio intervenían una zona aledaña a su propiedad. Rivera aseguro que el Instituto Metropolitano de Patrimonio no trabajaba en obras en la zona.

Al momento, agentes metropolitanos colaboran con la evacuación de enseres de las familias afectadas, mientras técnicos del Cuerpo de Bomberos y del Municipio analizan el estado de lo que resta de la casa afectada. (I)