Un grinch y una maestra jubilada son los personajes principales de dos obras navideñas que se presentarán este mes y que cuentan con un mensaje sobre la real importancia de la Navidad.

El actor y director Augusto Enríquez, del grupo Kurombos, pondrá en escena la obra Navidad de ensueño, una versión escrita por él sobre el personaje de cine Grinch, al que no solo no le gusta la Navidad, sino que la odia.

La obra infantil se presentará el próximo 18 de diciembre con funciones a las 10:30 y a las 12:00, en el Teatro Centro de Arte, en el kilómetro 4,5 de la vía a la costa.

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Enríquez dice que es una obra de estreno y que la historia transcurre en el pueblo Quien, donde vive el personaje Grinch. Quien está ubicado dentro de un gran copo de nieve.

Los quienes, que son los pobladores, tienen por costumbre celebrar muy efusivamente la Navidad, pero el Grinch llega para llevárseles todos los regalos, el árbol navideño y los deja sin esos elementos simbólicos de la Navidad.

“Pero los quienes se dan cuenta de que no necesitan de ello, que lo que necesitan es el amor de la familia, el compartir con los vecinos. El Grinch pensaba que al quitarles todo se iba a acabar la Navidad, pero al ver que no es así se pone mal”, cuenta Augusto.

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Son tres familias, una conformada por el papá, la mamá y una pequeña, la otra son los padres y una hija adolescente, y la tercera familia está compuesta por el alcalde y su esposa.

El elenco, compuesto por Betsy Salvador, Cristina Barros, Alison Tacuri, Osvaldo Cedeño, Ronald Villa, Fernando Arboleda, Raúl Vergara, Jenny Quirola, Abigail Sarcos y René Lino, empezó a trabajar hace tres semanas en los ensayos.

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La actriz Miriam Murillo, esposa de Augusto, está a cargo del vestuario y el maquillaje de todo el elenco. Ella dice que para dar vida al Grinch se ha inspirado en el personaje de la película y va a utilizar maquillaje con aceites.

“Estoy usando el rojo y el verde porque así es el personaje y las arruguitas son de color negro. Aunque en la película se usan muchas prótesis, nosotros no, porque hay que hablar y hacer mucho movimiento y eso se despega con el sudor”, explica la actriz.

Abigail Sarcos, de 7 años, tiene el papel de la niña Cindy, que es quien hace que el hombre verde se incorpore a la celebración de la Navidad. Ella fue elegida para trabajar en la obra, porque según Augusto, se acopló muy bien al papel.

“Es la segunda vez que participo en una obra de teatro, antes lo hice en la Caperucita Roja, en la que hice del personaje principal. Fue un papel muy importante para mí como actriz y ahora estoy muy emocionada con este nuevo personaje”, dice la pequeña, quien ha participado en los talleres de actuación del grupo Kurombos.

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Augusto añade que el fin de esta obra para los niños y la familia es llevar un mensaje al público del verdadero sentido de la Navidad.

“Es la época del año que muchos la toman como de consumo, de los regalos, de tener el mejor árbol navideño, pero lo importante es estar juntos y compartir con los demás”, dice.

El costo de la entrada para ver Navidad de ensueño es de $ 7 y se la puede adquirir en la boletería del Teatro Centro de Arte.

Por décimo año el actor Lucho Mueckay llevará a escena el monólogo Se acabó la Navidad... ¿Dónde se fueron los pastores?, en la que metido en la piel de su personaje la profesora Norma Lixta abordará las situaciones que se presentan en está época en muchos hogares y en la sociedad en general.

El monólogo que estará cargado de humor y de mensajes positivos se presentará los próximos 17 de diciembre, a las 20:30; y 18 de diciembre, a las 19:00, con dos funciones cada día, en el Teatro Centro de Arte. La entrada costará 20 dólares y se la puede adquirir en la boletería del teatro, en los puntos de venta de TicketShow o en el Centro Cultural Sarao, ubicado en la ciudadela Kennedy, calle Primera Oeste 313 y avenida San Jorge.

Desde el estreno de la obra en el 2007 se han realizado unas 80 presentaciones, indica Lucho, quien cada año le hace una variación al contenido para que esté a tono con lo que ocurre en esa época.

El actor cree que su monólogo se ha vuelto una costumbre entre el público y que es muy esperado, porque las personas disfrutan mucho con lo que dice la profesora, quien es una jubilada que dejó muchos temas en el tintero y ahora los va sacando poco a poco.

Sobre lo que dice Norma Lixta en Se acabó la Navidad...¿Dónde se fueron los pastores?, el actor indica que habla de que las navidades ya no son como antes, de que se está viviendo una época digital en la que se ha perdido el contacto cercano con las personas en estas fechas navideñas.

“Las personas ahora envían mensajes escritos, las distancias han cambiado y eso hace que muchas familias ya no se junten para darse un abrazo y compartir. En el mónólogo se recuerda mucho lo que eran antes las navidades”, dice,

“Es un monólogo escrito por mí, yo siempre escribo en base a la vida real. La obra dura dos horas, pero a veces se extiende porque el público se emociona”, puntualiza. (E)