Hacer de la universidad una institución inclusiva pero rigorosa académicamente, de calidad y que tenga sostenibilidad financiera desde el Estado, son algunos de los planteamientos que se analizan en el seminario internacional de educación superior que se desarrolla desde ayer hasta hoy en la ciudad.

El evento, que reúne a académicos nacionales y de países como Argentina, Venezuela, Brasil, El Salvador, Costa Rica, México, España y Canadá, es parte del proyecto nacional denominado Agenda 2035.

A través de esta iniciativa se busca formular, mediante métodos participativos, políticas públicas de educación superior con miras a ese año, y un plan estratégico a implementarse entre 2017 y 2021, que permita el proceso de transición hacia el modelo trazado como ideal.

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Así lo indicó Washington Macías, asesor del rectorado de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), sede del seminario en la urbe porteña.

Ayer, en la inauguración del evento, estuvo René Ramírez, titular de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Senescyt), quien destacó la importancia de compartir con expertos internacionales la visión del sistema universitario, que apunta a cambios estructurales en el mundo.

“Tiene que ser un sistema que base, sobre todo, la educación y la gestión del conocimiento en la recuperación del sentido público”, expresó.

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Entre las temáticas que se abordarán figuran la autonomía y democratización de la educación superior, aseguramiento de la calidad educativa e investigación, desarrollo e innovación en el sistema.

Louis Lemkow, docente de la Universidad Autónoma de Barcelona, señaló que para garantizar el acceso a las universidades es importante que los gobiernos trabajen para construir una igualdad social. (I)