El amor divino rodea al mundo, fluyendo de corazón a corazón como paz.

Paz mundial
En el nivel más profundo, todos los seres buscan paz. Bajo la cobertura externa de todo ser humano palpita un corazón creado de amor puro. Oro partiendo de esta conciencia, visualizando que cada persona está vinculada con su ser divino y que actúa desde ese lugar sagrado. Visualizo que el mundo está rodeado de paz y envuelto en el fluir cálido del amor divino. Con gratitud, afirmo: El fluir del amor divino conecta y sana al mundo y a todos sus habitantes. Yo también actúo partiendo de mi divinidad interna, reconociendo que cada palabra que digo y cada acción que tomo pueden ser pacíficas y amorosas. El amor divino fluye de mi corazón para bendecir al mundo.

Salmo 85:8
Escucharé lo que el Señor va a decir, pues va a hablar de paz a su pueblo. (F)