Para el vicepresidente de la República, Jorge Glas, Ecuador podrá elegir en los próximos comicios entre dos visiones: "un Guayaquil para todos o un Guayaquil para unos pocos". La frase fue parte de un discurso muy de campaña que, este domingo, dio el segundo mandatario en Guayaquil, por celebrarse los 196 años de independencia de la ciudad.

Esta sesión popular del oficialismo se cumplió en el corazón del suburbio, en Francisco Segura y Gallegos Lara. Ahí, con la ausencia del presidente Rafael Correa, fue Glas el encargado de cerrar el evento pasadas las 18:00. El vicepresidente, también candidato al mismo cargo para las próximas elecciones por Alianza PAIS, dijo que los guayaquileños son "víctimas de una administración municipal que solo trabaja para unos pocos".

"Después de casi 25 años de gobierno municipal socialcristiano, Guayaquil sigue siendo una de las ciudades con mayor índice de necesidades básicas insatisfechas, en pleno siglo XXI", señaló a modo de crítica a la gestión del alcalde Jaime Nebot, quien minutos antes dio su discurso en el Palacio de Cristal.

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"Gran parte de guayaquileños carece de alguno de los servicios básicos y todavía muchos viven en condición de hacinamiento. La pobreza no se soluciona pintando casas ni con garrotazos a los vendedores informales. En nuestra ciudad las calles no sirven para unir sectores sino para marcar los límites entre la ostentación y la más dura pobreza", agregó Glas.

Línea seguida, el candidato a la reelección hizo campaña. "El pueblo ecuatoriano podrá elegir entre dos visiones: un Guayaquil para todos, o un Guayaquil para unos pocos; un Guayaquil de oportunidades o un Guayaquil con pobreza; un Guayaquil con empleo, salud y educación o un Guayaquil del 'sálvese quien pueda'. Son los mismos que hoy nos hablan de libertad. No nos confundamos, esa es su libertad, su libertad de dejar dinero en paraísos fiscales. Su libertad de no incluir a quienes siempre quedaron fuera".

Entonces Glas expuso la propuesta del oficialismo. "La libertad que nos planteamos nosotros es una libertad con equidad y justicia social. La libertad de las personas con discapacidad de ser incluidos. La libertad de Bastión Popular de tener servicios públicos. La libertad del Guasmo para tener un plan de desarrollo. La libertad de los emprendedores para hacer crecer sus empresas, la libertad de todos los guayaquileños de ir por más".

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El otro lado del discurso de Glas se concentró en recordar las obras del Gobierno central en Guayaquil, como la creación de áreas verdes, parques nacionales, centros de educación, salud y seguridad. "Este es un Gobierno que se ha encargado de entregarles una ciudad sin abismos sociales, donde no se esconda la pobreza (...). Hay mejor empleo, más conocimiento, más emprendimiento, pero también hay más sonrisas, más esperanza, más oportunidades para todos. Hoy ningún ecuatoriano está solo", dijo.

Glas contó que con toda la obra pública estatal se instala "la plataforma con la que construiremos el Ecuador del futuro".

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En la sesión popular estuvieron el gobernador del Guayas, Julio César Quiñónez; la presidenta y la segunda vicepresidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira y Marcela Aguiñaga; el presidente del Consejo de la Judicatura, Gustavo Jalkh; entre otros. No asistió el prefecto del Guayas, Jimmy Jairala, a quien se lo veía siempre en los actos del oficialismo. En su reemplazo estuvo la viceprefecta Mónica Becerra. (I)