Queda por reparar algunos servicios básicos afectados

La situación de infraestructura en Bahía de Caráquez quedó golpeada en cuanto a agua potable, alcantarillado, telefonía y el sector hotelero.

El alcalde Manuel Gilces evalúa los hechos y dice que han logrado restablecer en un 55% el abastecimiento de agua. “A cada momento nos encontramos con daños porque se rompen las tuberías porque son de asbesto cemento”, afirma.

Señala que hace tres meses presentó al Comité de Reconstrucción, organismo creado por el Gobierno central, un proyecto para cambio de las redes y ya está contratado por tres millones y medio de dólares.

Así también se ha asignado un millón y medio para las lagunas de oxidación y dos millones de dólares en los tanques de distribución de agua.

Además están trabajando en el acceso a Bahía que cuesta 22 millones de dólares. Todo del Comité de Reconstrucción.

Gilces afirma que como presidente regional de la AME ha escuchado a sus colegas alcaldes que se quejan por la falta de atención del Gobierno.

“Pero deben reconocer que ellos tampoco han presentado sus proyectos a tiempo”. Asegura que ha logrado 37 millones de los 75 millones de dólares que costaría la reconstrucción de su cantón.

En ese escenario ha surgido el Comité cívico manabita, del que Leonardo Viteri Molinari es miembro.

Para él la solución es que el Gobierno declare a Bahía zona franca o una especie de duty free donde se vendan productos importados sin impuestos.

“Solo así lograremos atraer visitantes, porque vendrían a comprar y dejarían recursos para la recuperación de Bahía de Caráquez”, manifiesta Viteri. (I)

Postura
Proyecto

Asambleístas
El alcalde de Bahía, Manuel Gilces, recibió con agrado el plan propuesto por un comité cívico manabita para proponer a la ciudad como una zona franca, pero dice que hay que integrar a los asambleístas.