El conservador Partido Popular firmó el viernes un acuerdo con Ciudadanos, una nueva formación cercana al sector empresarial, que podría desbloquear el proceso para formar gobierno y evitar unas terceras elecciones generales, una situación inédita en España.

Los dos partidos acordaron un paquete con las condiciones propuestas por Ciudadanos. El Parlamento anunció en la víspera que el candidato del Partido Popular, Mariano Rajoy, que ahora ejerce de presidente en funciones, se someterá a una votación de investidura el próximo 31 de agosto.

En la primera votación, Rajoy necesita el apoyo de 176 de los 350 diputados de la cámara baja. En la reedición de los comicios el pasado diciembre, los "populares" fueron los más votados, con 123 escaños, mientras que Ciudadanos fue la cuarta fuerza con 40 representantes. En la segunda votación, a Rajoy le bastaría con tener más votos a favor que en contra.

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El partido de Rajoy, en el poder desde el 2011, ganó las elecciones en junio con 137 escaños, 39 menos de la mayoría necesaria en el parlamento de 350 puestos. El Partido Socialista llegó de segundo con 85. La alianza izquierdista Unidos Podemos quedó de tercera con 71 y Ciudadanos de cuarto con 32.

Las elecciones de junio se convocaron debido a que las anteriores, en diciembre, no arrojaron un claro ganador.

Si la situación continúa estancada dos meses después de la sesión de investidura, se celebrarán nuevas elecciones, que podrían ser el 25 de diciembre.

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El PP y Ciudadanos están ahora presionando al Partido Socialista, que ha estado al timón de la mayoría de los gobiernos españoles de las décadas recientes, para que por lo menos se abstenga y ponga fin al estancamiento. Pero los socialistas insisten en que votarán "no".

En la primera votación, Rajoy debe obtener una mayoría absoluta de votos parlamentarios. Si no lo logra habrá otra votación el 2 de septiembre en que sólo necesitará más votos a favor que en contra.

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Ciudadanos insiste en que el acuerdo abarca sólo el voto de investidura y que seguirá siendo oposición.

Hasta el momento, los esfuerzos de Rajoy por obtener apoyos suficientes en la cámara para poner fin a ocho meses de estancamiento político tras dos comicios no concluyentes no han dado resultados. La mayoría de los diputados dijo que votará en contra de su candidatura. (I)