Las autoridades activaron este jueves una nueva alerta ambiental para la Ciudad de México y zona conurbada después de que los niveles de ozono alcanzaron poco más del 150% de los niveles considerados aceptables, algo inusual durante la época de lluvias en el verano.

La alerta conlleva restricciones a la cantidad de automóviles que podrán circular el viernes y limita algunas actividades contaminantes de instituciones, empresas e industrias.

La Comisión Ambiental de la Megalópolis indicó en un comunicado que la estabilidad atmosférica, el viento débil en superficie y la radiación solar continua que se presentó el jueves generada por un sistema de alta presión fue lo que dificultó la dispersión de las partículas contaminantes.

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El peor nivel de contaminación se registró en una zona del sur de la ciudad donde se alcanzaron los 158 puntos de ozono, lo cual se considera "muy malo". Después de algunas lluvias durante la tarde en varias partes de la ciudad, la calidad del aire mejoró a "buena" o "regular" para casi toda la región, según la comisión.

Medidas no fueron efectivas

En marzo, cuando se registraron niveles de ozono de 203 puntos, se activaron las alarmas por primera vez desde 2005, lo que supuso que las medidas implementadas desde la década de 1990 no habían sido tan efectivas como se esperaba. Estas incluyeron instalar sistemas limpios en fábricas u obligarlas a retirarse de la ciudad, prohibir el uso de gasolina con plomo e imponer estándares más estrictos para las emisiones de los automóviles.

Sin embargo, el año pasado la Corte Suprema anuló una ley que prohibía la circulación de coches de más de ocho años al menos seis días al mes, una decisión que, según las autoridades, conllevó a que cada día circularan por la ciudad 1,4 millones de coches más, la mayoría muy contaminantes.

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Con la medida del jueves, ya son 10 veces que se activa la alerta ambiental en 2016 y la segunda desde que comenzó la temporada de lluvias, las cuales generalmente limpian el ambiente. Tras persistentes niveles elevados de contaminación registrados en marzo, las autoridades también redujeron el umbral en el índice para que declaren una alerta, de 200 a 150.

No obstante, las autoridades aseguran que la contaminación en la actualidad es mucho menor que la de hace dos décadas, cuando se registró el nivel máximo de contaminantes del que se tiene registro, 398 puntos en marzo de 1992.

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Es inusual que se acumule el smog en la Ciudad de México durante el verano, época en la que las lluvias casi diarias y los fuertes vientos suelen arrastrar las partículas contaminantes. Sin embargo, hubo una alerta el 8 de julio, también durante la temporada de lluvias. (I)