De manera extraoficial varios frentistas que se encuentran a lo largo del tranvía se enteraron, a fines de la semana anterior, de que algunos tramos por donde se movilizará este nuevo medio de transporte se restringirán al tráfico vehicular.

“Queremos que nos digan la verdad, no queremos causar caos, pedimos una reunión inmediata con los administradores para buscar urgentes soluciones al impacto económico, ambiental y social que produzca el tranvía cuando empiece a funcionar”, comentó Teresa Bermeo, integrante de la veeduría ciudadana que controla el cronograma de ejecución de esta obra.

“No estamos de acuerdo y no permitiremos que maten la actividad comercial del centro histórico”, fue la consigna al final de un encuentro que se dio la semana pasada, en donde el rechazo a la propuesta fue casi unánime entre un centenar de frentistas del tranvía. En dicha reunión l la Dirección de Movilidad expuso su plan previsto para la ciudad.

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Romeo Moncayo, director del proyecto Tranvía de los Cuatro Ríos, confirmó que son cinco tramos por los que no circulan vehículos en el Centro Histórico. En la calle Mariscal Lamar, desde la Estévez de Toral hasta la Tarqui (dos cuadras); en la Mariano Cueva entre Lamar y Sangurima (una cuadra).

En la calle Gran Colombia son tres tramos, el primero desde la Octavio Cordero hasta la Miguel Heredia; el otro desde la Miguel Vélez hasta la Coronel Tálbot y finalmente el tramo comprendido entre Luis Cordero hasta la Borrero, cada uno alcanza una cuadra.

“Son zonas en donde se hacen cambios del recorrido, por ejemplo, cuando el tranvía va por la vereda sur por alguna razón específica de los diseños originales pasa al norte, esto provoca estrechamientos de la calzada y dentro de las normas es totalmente peligroso”, dijo Moncayo.

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Aunque el funcionario insistió en que no se trata de una peatonización, explicó que la restricción es para evitar riesgos, también el plan de Ordenamiento Territorial, Urbano y del Centro Histórico contemplan la restricción para evitar contaminación y disminuir la cantidad de vehículos en otros sectores del centro.

Para mitigar los riesgos, el funcionario dijo que una comisión formada por la Dirección de Movilidad, la Empresa de Movilidad (EMOV) y el departamento jurídico elaboran las bases para contratar a expertos que hagan un estudio de seguridad que se convierta en ordenanza, pero se desconoce cuándo estará listo.

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Dora Ordóñez, concejala que preside la Comisión de Obras Públicas, dijo que de acuerdo a la información técnica que recibieron la segunda semana de julio pasado, la sección mínima para un carril según la norma de tránsito es de 2,50 y 2,70 m, pero en los tramos referidos hay 2,30, lo cual impide la circulación.

Ordóñez dijo que el tranvía cambia la lógica integral en el centro histórico en lo referente a planificación urbana. “Lamentablemente el plan urbano se modificará y acoplará al tranvía también en las avenidas de las Américas, Huayna Cápac y España”, acotó la concejala.

En estos sectores también se prohibirá el ingreso de vehículos a parqueaderos públicos y privados de casas y departamentos, añadió Ordóñez. (F)

2,50
metros es el mínimo de ancho que debe tener un carril.

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