Emocionados, niños de edad escolar se volcaron ayer al parque acuático de la cooperativa Juan Montalvo, en el norte de Guayaquil, para desplazarse en una de las cuatro resbaladeras de al menos 5 metros de longitud. El sitio abrió sus puertas una vez que fue inaugurado por el alcalde Jaime Nebot.

El acceso a la piscina y a la resbaladera es exclusivo para niños, a partir de los 4 años. Hay personal de apoyo que pidió a los niños mantener el orden. El ingreso es de martes a domingo, de 10:00 a 14:00.

Los niños bañistas tenían que descender de cuatro en cuatro, por seguridad.

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Los padres mostraron beneplácito de contar con esa infraestructura recreativa cerca de casa. Luis Javier Rodríguez regresaba de su trabajo nocturno cuando se percató de que los visitantes disfrutaban de los espacios. “Vivo cerca, más tarde traigo a mi hijo”, mencionó.

Los niños que ya se habían bañado no querían ir con sus papás, que los llamaban. (I)