Un sondeo de la firma Proética reveló que, para el 62% de la población, la inseguridad es el principal problema que afronta Perú. Otro estudio de esta encuestadora y de Ipsos arrojó que después de la inseguridad, la corrupción es el problema social más urgente en el país.

Estos son parte de los retos más importantes a los que se enfrenta desde hoy Pedro Pablo Kuczynski (PPK), quien asume la presidencia del Perú con planes de convertir al país en la estrella de la región, pero que necesita del apoyo de una poderosa oposición, que podría condicionar su respaldo a que su líder preso, Alberto Fujimori, sea indultado, otro de los desafíos para el nuevo gobernante.

PPK se enfrenta a una resaca política, no económica, analiza The New York Times en un artículo sobre cómo el tiempo de los altos precios del petróleo o la soya desataron el populismo de países latinoamericanos y que luego la baja de esos precios históricos derivó en una resaca política y económica en naciones como Venezuela o Brasil.

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Entre 2001 y 2013, la economía peruana creció a un promedio anual de 6,1%, la pobreza cayó de 55% a 24%, y la extrema pobreza debajo del 5%. Según el FMI, durante este año la economía latinoamericana se contraerá en 0,4%, mientras la peruana crecerá 3,7%. La proyección para el 2017 es 4,1%. Perú mantendrá su economía como la más dinámica de Sudamérica, indica el diario.

Según The New York Times en el caso de Perú se trata de una resaca política e institucional. Los años de boom transcurrieron sin empujar las reformas más necesarias ni consolidar la democracia. Ninguno de los tres últimos gobiernos que presidieron el superciclo económico intentó una reforma de la Policía o el Poder Judicial.

Carlos Basombrío, quien asume el Ministerio del Interior, ya anticipó sobre importantes cambios en la Policía Nacional como parte de una reestructuración y reforma de la institución, entre ellas la evaluación y reducción de generales, publicó larepubica.pe.

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La creación del programa Barrio Seguro, triplicar la cantidad de policías de inteligencia e investigadores o construir comisarías son parte del trabajo en materia de seguridad.

Mientras para el problema de la corrupción se planea la creación de comisiones anticorrupción en el país.

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El exbanquero de Wall Street promete una “revolución social” en el Perú. Con virtudes más técnicas que políticas, después de su muy ajustado triunfo electoral ha subido en popularidad unos cinco puntos porcentuales (a 55%), menos de lo que ocurrió con sus antecesores al inicio, publicó Afp.

“La elección estuvo polarizada y hay un porcentaje de gente que simpatiza con el fujimorismo. Va a necesitar del respaldo social para hacer reformas, más aún si no tiene mayoría en el Congreso”, dijo el director de la consultora Vox Populi, Luis Benavente.

Desde su estrecha victoria, Kuczynski, que solo cuenta con 18 diputados, ha lanzado mensajes de acercamiento a las principales fuerzas políticas del país para lograr apoyo. (I)