Antes de las 16:00 de ayer, un germano-iraní de 18 años de la capital bávara abrió fuego a la salida de un local de hamburguesas y continuó disparando en el centro comercial vecino Olympia Einkaufszentrum en la ciudad alemana de Múnich, donde sembró el pánico, antes de darse a la fuga, según las autoridades policiales.

El atacante mató a tiros a nueve personas y dejó heridas a otras 16, de las cuales tres están en peligro de muerte, tuiteó anoche la policía. Entre las víctimas constan jóvenes y niños. Estos últimos, heridos.

“Las motivaciones siguen estando totalmente no dilucidadas”, añadió la policía.

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Tras el tiroteo, las autoridades recomendaron a la gente que se aleje de las calles de la tercera ciudad en importancia de Alemania (con millón y medio de habitantes) porque estaban fugados al menos tres presuntos tiradores. Ahí se paralizó el transporte público y se bloquearon autopistas.

“Se sintieron muchos disparos, no podría decir cuántos, pero fueron muchos”, dijo por teléfono una empleada de un local del centro comercial.

El pánico se apoderó de los habitantes de esta ciudad, puesta en estado de emergencia.

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El ataque es el tercero en ocho días contra civiles en Europa occidental, tras otros en Francia (Niza, donde un hombre en un camión mató a 84 personas) y Alemania (Baviera, un ataque con hacha dejó 5 heridos) que se atribuyó el grupo radical Estado Islámico (EI).

Un portavoz de la Policía dijo que no había información inmediata de que se hubiese tratado de un ataque de islamistas radicales, pero que el asunto se estaba gestionando como un incidente terrorista.

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Aunque nadie se atribuyó de manera inmediata el ataque, partidarios del EI celebraron en redes sociales.

La canciller alemana, Angela Merkel, convocó para hoy una reunión de su consejo federal de seguridad en Berlín.

La policía desmintió un segundo tiroteo en otro lugar del este de la ciudad, pese a que supuestos testigos dijeron haberlo presenciado.

El presidente estadounidense, Barack Obama, prometió a las autoridades alemanas “todo el apoyo que necesiten”, manifestó. Otros mandatarios condenaron también el ataque, calificado de terrorista. (I)

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