Fernando Álvarez y Nixon Zambrano, moradores de este cantón del norte de Manabí, se imaginaron una nueva catásrofe a las 18:45 del pasado jueves. Pensaron que había llegado el fin del mundo o un gran terremoto. “Nos abrazamos con la familia para esperar lo peor”, coincidieron ambos.

Pero en realidad era un estruendo causado por un material explosivo utilizado para un ensayo en la demolición del hospital Napoleón Dávila Córdova, muy dañado por el terremoto del 16 de abril.

La detonación del artefacto causó conmoción y afectaciones en sus alrededores. Varios vecinos llegaron al sitio para ingresar al hospital y manifestar su indignación. Algunos culpaban al alcalde Deyton Alcívar. Miembros de la Policía evitaron su acceso.

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Tras el incidente también, hasta el lugar llegaron autoridades locales y provinciales. Inmediatamente, el Comité de Operaciones Emergentes (COE) se instaló para analizar lo sucedido. Según el informe de la mesa 5 de seguridad, en el contrato no dice la utilización de explosivos en el derrocamiento del edificio del hospital, mientras que el contratista Walter O. está detenido.

Alcívar añadió que solo hay daños materiales, no heridos. “La obra de demolición queda suspendida”, señaló.

La explosión generó afectaciones en 16 viviendas, según un informe preliminar del Cuerpo de Bomberos. El nerviosismo invadió a los vecinos. En la casa de José Álava Intriago se destruyó una ventana de vidrio, al igual que en la Unidad Educativa Amazonas.

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Mauricio Moreira asustado salió a la calle, agarró a sus dos niños de 5 y 8 años. En cambio, Marlon Moreira Mera, quien se encontraba en su vivienda junto a su familia en la ciudadela Bowen, a ocho cuadras del hospital en demolición, se abrazó con su familia y de rodillas imploró a Dios “que nos permita seguir viviendo”.

El contratista de la demolición, Walter O., fue detenido de manera preventiva por la Policía, quien indicó a la mesa de seguridad del COE, ser el único responsable de lo sucedido y detalló la utilización de explosivos para realizar pruebas de rotura en columnas para el derrocamiento de la estructura del hospital local, y que se haría cargo de los daños causados a terceros.

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De su parte, Walter Villavicencio, fiscalizador contratado por el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), reiteró que en el contrato solo indicaba la demolición con maquinarias, retiro del material y acarreo del mismo. El MTOP dispuso la finalización anticipada del contrato de demolición y que el contratista deberá responder por las afectaciones a terceros, comunicó a través de un boletín de prensa.

La tarde de ayer, una vez finalizada la audiencia de flagrancia se dictaron 30 días de prisión preventiva para el contratista Walter O. (I)

Demolición
Hospital

Trabajo
La demolición del hospital Napoleón Dávila de Chone se había iniciado el lunes pasado con trabajos de maquinaria pesada en el área de consulta externa.

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Nuevo hospital
Culminada la demolición, las autoridades decidirán el inicio de la construcción del nuevo hospital, que tendrá similitud con actual de Yantzaza, Zamora Chinchipe.